Bogo Scooters ha creado un patinete eléctrico con dos manillares que ofrecerá dentro de su programa de micromovilidad compartida junto a los tradicionales patinetes de una sola plaza. La empresa asegura que esta solución, además de más económica para sus clientes, añade un plus de seguridad sobre los patinetes convencionales que, en muchas ocasiones y de forma irresponsable, son utilizados por dos personas.
El auge de los patinetes eléctricos, tanto privados como compartidos, está obligando a muchos ayuntamientos a redactar normativas, casi de forma urgente, para regular su circulación e intentar reducir los accidentes, en algunos casos muy graves, en los que se ven envueltos. Si la polémica sobre el peligro que supone la circulación de patinetes eléctricos en las ciudades está servida, la empresa estadounidense Bogo Scooters, que ofrece un servicio de patinetes eléctricos compartidos, le ha dado una vuelta más con el anuncio de un patinete eléctrico para dos personas con dos manillares.
Patinete eléctrico para dos personas de Bogo.
La mayoría de los usuarios de patinetes eléctricos son inexpertos y están aprendiendo sobre la marcha a manejarlos. El incremento de los accidentes se debe a un aumento exponencial de los viajes, a las conductas de conducción irresponsables y a la propia naturaleza de un vehículo, con una plataforma pequeña para situar los pies y una enrevesada manejabilidad dificultada por sus estrechos manillares y sus pequeñas ruedas.
Bogo Scooter asegura, al contrario de lo que podría pensarse inicialmente, que un patinete para dos usuarios, con dos manillares, aporta un extra de seguridad al manejo y la circulación: "Cuando dos personas montan sobre un patinete diseñado para una sola, cambia el equilibrio y la distribución de pesos, lo que los hace extremadamente peligrosos. Con esta solución el pasajero de la parte trasera cuenta con un punto de apoyo y con más espacio para situar sus pies": Además, Bogo ofrece la posibilidad de que los jóvenes que no poseen una licencia de conducción, y por lo tanto no pueden usar los patinetes solos, puedan acceder a ellos al poder ser acompañados por una persona mayor de edad.
Las razones que aporta Bogo son, al menos, discutibles. El pasajero situado detrás carece casi por completo de visibilidad y no tiene posibilidad alguna de dirigir el patinete. Eso quiere decir que no responderá a los cambios de dirección de la misma forma que el piloto, lo que podría complicar el control cuando este comience a balancearse. La coordinación entre ambos es imprescindible y también compleja de lograr teniendo en cuenta que además detrás se situará el usuario más inexperto en unas condiciones de prácticamente nula capacidad de intervención sobre el manejo.
El patinete doble aporta algunas soluciones técnicas extra como es una base de mayores dimensiones para situar una batería más grande y por lo tanto una mayor autonomía, aunque esta también se reduce al trasladar mucho más peso. De esta forma se permiten no solo recorridos más largos sino más horas de funcionamiento ya que es necesario retirarlos del servicio para recargar sus baterías menos veces al día.
El patinete eléctrico para dos personas cuenta con una batería más grande, más espacio para los pies y un segundo manillar como punto de apoyo para el pasajero.
Bogo fabrica los dos modelos de patinete que ofrecerá en breve (los habituales de una persona y los nuevos de dos) en sus instalaciones de Nevada, en Estados Unidos. Por ahora tiene licencia para arrancar sus operaciones en San Diego, mientras que en otras ciudades como Las Vegas y el Condado de Orange el servicio está programado para arrancar a finales de 2019.
El precio del alquiler, tanto para los patinetes de una persona como para los de dos será el mismo.: un dólar en el momento de activar el patinete y 15 centavos cada minuto, la misma estructura de precios que ofrecen otras compañías como Lime o Bird.
