Aunque el Chevrolet Bolt EV eléctrico lleva ya algo más de tres años en el mercado, es ahora cuando parece que General Motors se ha puesto realmente seria en materia de movilidad eléctrica. Y es que el mayor fabricante de coches de Estados Unidos ha anunciado que invertirá 2.000 millones de euros (2.200 millones de dólares) en su fábrica de Detroit-Hamtramck para construir pick-ups y SUV eléctricos, convirtiéndola en su primera planta dedicada en exclusiva al ensamblaje de coches eléctricos.
La medida creará 1.300 nuevos puestos de trabajo, pasando de los 900 actuales a 2.200, y forma parte de un plan estructural mayor en el que General Motor invertirá 7.700 millones de dólares en los próximos cuatro años. Actualmente la factoría de Detroit-Hamtramck opera un turno de producción y en ella se produce el Cadillac CT6 y los Chevrolet Impala. No obstante, a finales del mes de febrero comenzará la renovación de la fábrica y permanecerá inactiva durante varios meses, mientras duren las obras.
Está previsto que salgan los primeros coches eléctricos de la línea de montaje de la nueva fábrica para finales de 2021. La CEO de General Motors, Mary Barra, ha confirmado que el primer modelo en salir de esta fábrica será una pick-up eléctrica, aunque de momento poco más se sabe al respecto -al menos de manera oficial-. No obstante, y como os anunciamos semanas atrás, muy probablemente General Motors anuncie el próximo 2 de febrero la vuelta de Hummer como marca de pick-ups y SUVs eléctricos.
Esa primera pick-up será seguida por el Cruise Origin, el coche autónomo de General Motors presentado hace apenas una semana. En última instancia, la fábrica producirá «una variedad de pick-ups y SUVs totalmente eléctricos», según ha confirmado GM, entre los que se incluirá el nuevo Cadillac Escalade eléctrico.
Entre los cambios anunciados por General Motors están la renovación del taller de pintura de la fábrica, del taller de carrocería y la renovación del área de ensamblaje general para adaptarla a la producción de coches eléctricos. Las baterías serán suministradas a través de una joint-venture (empresa conjunta) con LG Chem. La empresa coreana invertirá 2.300 millones de dólares en una fábrica de baterías en Ohio (Estados Unidos), que complementará a la actual fábrica de baterías que General Motors tiene en Michigan.
Actualmente, General Motors tiene solamente un coche eléctrico en el mercado: el Chevrolet Bolt EV. No obstante, este se fabrica en una planta donde también se producen coches de combustión. Hasta el año pasado, en la factoría de Detroit-Hamtramck se fabricaba también el Chevrolet Volt, un coche eléctrico de autonomía extendida. La apuesta por los coches eléctricos aumentará notablemente en los próximos años, pues General Motors planea lanzar 20 modelos totalmente eléctricos de aquí a 2023.
