Bien es cierto que Europa (y España en particular) demanda vehículos eléctricos urbanos de precio asequible. Este tipo de modelos son los más adecuados para la movilidad en las ciudades, ya que presentan las comodidades -justas- de un coche eléctrico, pero con un tamaño muy reducido, así como la posibilidad de ser conducidos por jóvenes que aún no tienen el carné B de conducir. A la oferta ya presente se unirá próximamente una alternativa de lo más llamativa: se llama Luvly 0 y su principal capacidad de ahorro de costes es que su envío se hará con el vehículo totalmente desmontado. Sí, haciendo uso del "método" IKEA.
Aunque parezca una locura, ciertamente no lo es tanto. El Lovly 0 no tendrás que montarlo en tu propia casa, ya que para ello la firma está trabajando con ciertos centros que llevarán a cabo esta tarea de forma segura y que se asentarán en las principales ciudades europeas. De esta manera, la marca ahorrará un importante coste en envío y transporte, con lo que el precio final del vehículo eléctrico es significativamente más bajo que su competencia.
Una estética minimalista
La imagen del Lovly 0 presenta unas formas del todo simplistas. Nada de detalles llamativos o elementos aerodinámicos. Simplicidad en estado puro. En el frontal, únicamente destacan sus faros redondos que se unen por una tira LED, lo que le da el único toque particular. Los propios pasos de rueda se meten de lleno en el morro del coche y forman parte de su parachoques.
El Lovly 0 incorpora unas pequeñas ruedas de diseño totalmente minimalista que integran unos frenos de tambor. La trasera nuevamente prescinde de todo tipo de elementos decorativos e incluso de una luneta. La zaga se encuentra completamente cerrada. En los extremos se ubican unos particulares faros LED con los que anunciar la posición u otros menesteres. Repitiendo la receta del frontal, los propios pasos de rueda se integran en el “parachoques” del modelo eléctrico.
Sus cotas son tan reducidas como cabría esperar: 2,70 metros de longitud, 1,53 de altura y 1,44 m de alto. En comparación con un Citroën AMI, es 30 centímetros más largo, 5 centímetros más ancho y 1 centímetro más alto.
Sin embargo, y pese a su particular apariencia, desde la marca afirman que es un vehículo totalmente seguro, ya que está desarrollado de forma que, en caso de impacto, absorba la energía del choque y sus ocupantes permanezcan a salvo dentro de una cubierta de seguridad que rodea al habitáculo. Su fabricación se lleva a cabo con piezas recicladas y reciclables y se guardan en una caja plana con la que garantizar un envío asequible y un impacto ecológico casi neutral. Según la compañía, este vehículo ahorra un 80% de la energía durante su producción y funcionamiento con respecto a un coche eléctrico “convencional”.
Del interior, particularmente, la empresa no ha publicado imágenes explicitas, aunque a través de las ventanas del pequeño coche eléctrico se pueden ver unos asientos decorados con una tapicería de tonos claros, con el logotipo de la compañía en los respaldos y unos paneles interiores de las puertas en algún tipo de material en color madera. Desde la compañía afirman que su volumen de carga del maletero es de 267 litros.
Mecánica 100% eléctrica con batería extraíble
La firma no ha ofrecido demasiados detalles concretos a la mecánica del Lovly 0. Entre su escueta lista de especificaciones destaca una batería con doble módulo extraíble, que pesan 15 kilos individualmente. Esta dupla alimenta un motor eléctrico (no especifica su autonomía) con el que el pequeño vehículo eléctrico puede alcanzar los 90 km/h y presentar una autonomía máxima de 100 kilómetros. Con todo ello, el peso total se sitúa por debajo de los 400 kilos.
La particularidad de poder extraer sus baterías para recargarlas en casa (más allá de la incomodidad de transportar estas pesadas baterías a mano) genera una ventaja significativa y es la eliminación de la necesidad de recargarlo en una plaza de garaje propia, por lo que podrá dormir en la calle sin ningún problema.
Precio y disponibilidad
Por el momento, el Lovly 0 todavía no está a la venta. Los interesados en hacerse con una unidad deberán rellenar un cuestionario de su página web oficial y esperar a que la empresa anuncie la apertura de pedidos. Aunque aún no se conoce su precio específicamente para España, se espera que su tarifa de partida sea de 10.000 euros, según apuntan desde su web.
Todavía son muchas las preguntas que guarda este pequeño coche eléctrico, ya que aún no se sabe dónde se llevará a cabo su ensamblaje en España y cuándo concretamente comenzará con sus ventas en nuestro país. Permaneceremos atentos para nueva información.
