Este motor eléctrico de Volkswagen vale tanto para coches eléctricos baratos como deportivos de 640 CV

En conjunto con un nuevo sistema de gestión térmico, Volkswagen pretende trasladar estas soluciones a la producción en masa.

Recreaciones digitales de los sistemas en cuestión.
Recreaciones digitales de los sistemas en cuestión.
13/02/2023 13:15
Actualizado a 23/02/2023 13:15

Si existe un fabricante que ha llevado hasta casi el extremo el uso del principio de la modularidad durante estos últimos años, ese ha sido el Grupo Volkswagen. El desarrollo de piezas que tenga cabida en el máximo número de modelos posibles no es algo nuevo en el consorcio alemán, y en la etapa eléctrica prometen llevar este concepto a un nuevo nivel. Tanto como para poder usar un mismo motor eléctrico en un coche eléctrico de carácter asequible o en un deportivo eléctrico de hasta 640 CV de potencia.

En los primeros pasos de la electrificación, los alemanes, apremiados por un rápido despliegue, optaron por solicitar la ayuda de fabricantes terceros. Piezas provenientes de varios proveedores que, si bien realizan un buen trabajo, no aprovechan al máximo las cualidades. Un circuito cerrado, como el que ha logrado Tesla a lo largo de estos años, es mucho más eficiente. Eso es lo que busca Volkswagen. El símil más aproximado es el de los teléfonos móviles: si el fabricante del dispositivo y el del sistema operativo son el mismo, el rendimiento es mayor y todas las aplicaciones funcionan mejor.

No sólo los motores han centrado toda la atención en el desarrollo del conjunto. El equipo diseñado por Volkswagen también incluye los inversores de pulsos y el sistema de gestión térmica, vital para hacer cada coche más eficiente. El inversor de pulsos es el cerebro del tren de transmisión de un eléctrico y es en gran parte responsable de la eficiencia y el rendimiento. Tras haber creado el hardware y el software desde cero, los componentes se pueden emplear en un amplio espectro de carrocerías, modelos y desarrollos. Desde eléctricos asequibles hasta en coches deportivos con más de 640 CV de potencia (500 kW).

Volkswagen espera reducir los costes de producción en masa que comenzará en 2025
Volkswagen espera reducir costes en la próxima generación de eléctricos desarrollados en la plataforma MEB.

Por el momento, sólo se ha producido un número limitado de unidades de potencia, aunque Volkswagen ya trabaja en alcanzar la madurez para la producción masiva a partir de 2025. La próxima generación de modelos basados en la plataforma MEB será la primera en utilizarlos. Con respecto a la gestión térmica, los ingenieros alemanes trabajan en ideas completamente nuevas. Si bien hoy en día se utilizan una gran cantidad de módulos individuales y conexiones de mangueras largas, en el futuro se reemplazarán por un módulo térmico integrado extremadamente compacto. Hace ya tiempo conocimos el sofisticado sistema de climatización del Volkswagen ID.7 con sus muchas tecnologías completamente nuevas.

El módulo térmico se encargará de controlar todo el equipo de climatización, incluyendo la batería de alto voltaje. Se espera que este formato tenga un gran impacto en la autonomía y la velocidad de carga. Una vez más el objetivo de un formato todo en uno busca mejorar la eficiencia, bajar el peso y reducir los costes de producción. Al fabricarlo en masa para sus diferentes marcas, el Grupo Volkswagen ahorrará dinero, algo que debería afectar al precio del producto final. Ya veremos si finalmente acaba siendo así. Todo el sistema espera aumentar en hasta un 20% la eficiencia general y así lograr el esperado posicionamiento del Grupo en lo referente a la movilidad eléctrica.

Sobre la firma
foto Javier Gomara
Javier Gómara

Ingeniero de carrera y periodista de motor por placer y pasión. Redactor de Híbridos y Eléctricos desde 2021, cubriendo la actualidad del sector de los vehículos eléctricos y la movilidad sostenible.

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