Para los occidentales, Japón siempre nos ha ofrecido alguna que otra locura: véase la producción de los Tamagochi, el drifting como entretenimiento de masas y, ahora, un minicoche eléctrico que cabe en una furgoneta.
En realidad, este KG Motors Mibot tiene todo el sentido… para Japón. Con unas dimensiones de 2,49 m de largo, sólo 1,13 m de ancho y 1,46 m, se adapta perfectamente a las estrechas calles de las ciudades japonesas. No en vano, según Kazunari Kusunoki, fundador de la start up KG Motors, que creó el Minibot en 2022 con la idea de llevarlo a una producción en masa en unos años, este coche surgió como una solución eléctrica ligera, asequible y eficiente a la problemática del tráfico en las urbes de Japón.
Este microcoche de locura cabe en una furgoneta
Pero la locura de coche que es el KG Minibot también se acopla perfectamente a la movilidad de este país. Y es que, según datos del gobierno nipón, el 70% de los trayectos que se realizan en ese país los realiza una única persona y, además, son de 10 km o menos.
Ahora bien, este rival del Citroën Ami, con quien comparte concepto de movilidad eléctrica sostenible, es tan estrecho que, en él, sólo cabe una persona. Eso sí, detrás de su único asiento, existe un hueco para transportar hasta 45 L de carga o equipaje.
A cambio, esta anchura tan escasa logra uno de los principales beneficios del MiBot, que resulta otra locura: cabe en el compartimento trasero de una furgoneta media.
Más allá de la anécdota, el que quepa en una furgoneta facilita mucho su transporte a largas distancias, ya que, como buen microurbano, este KG declara una autonomía de 100 km, frente a los 75 km del Citroën Ami. Más que suficiente para circular por ciudad, pero no mucho más allá.
Asimismo, y debido a su clara vocación urbana, el KG Motos Mibot equipa un motor eléctrico de tan sólo 0,59 kW, aunque alcanza picos de 5 kW o 6,7 CV. Eso es suficiente para alcanzar una velocidad máxima de 60 km -aunque no se sabe nada de su aceleración- o de subir pendientes de hasta el 23% de inclinación.
Equipa una batería de 7,58 kW -por la de 5,5 kWh del Citroën Ami- y lo mejor es que se conecta a una toma de corriente doméstica, que en Japón funcionan a 110V, y se recarga por completo en unas cinco horas.
Mientras tanto, su interior ofrece todo lo necesario para la conducción urbana, desde aire acondicionado a un asiento calefactado, pasando por una pantalla multimedia de 8”, conexión Bluetooth y unas ventanillas con protección solar.
Ya tiene vendida más de la producción prevista para 2026
El KG Motors Mibot tiene previsto venderse por apenas un millón de yenes. O lo que es lo mismo, apenas 6.030 euros. Y la compañía quiere iniciar la producción en serie del Mibot en el último trimestre de 2025, cuando ya habrá inaugurado una pequeña planta de producción en la ciudad japonesa de Hiroshima.
Esta start up espera haber fabricado 300 unidades ya para final de año y, para 2027, alcanzar las 3.300 unidades vendidas. Si todo sale bien, KG Motors querría producir 10.000 unidades anuales a medio plazo.
Pero tienen un problema. A día de hoy, las reservas para este cuadriciclo eléctrico que, recordemos, cabe en una furgoneta, ya han superado de sobre las 300 unidades previstas para 2025. De hecho, el Mibot ya ha alcanzado las 2.250 reservas. Por lo que todo parece indicar que desde KG Motors deberán incrementar, pronto y bastante, el volumen de producción.