La movilidad sostenible y medioambientalmente responsable no se basa exclusivamente en los modelos eléctricos. La Unión Europea ha prohibido la venta de vehículos térmicos a partir del año 2035 con la excepción de aquellos que sean capaces de usar combustibles sintéticos libres de emisiones. La nueva normativa ha sido acogida con respuestas dispares en la industria, pero está claro que se abre una nueva vía de negocio para las compañías petroleras que ven cómo en poco más de una década su negocio se verá extinguido. Repsol se prepara para ese horizonte de cero emisiones con la apertura de las primeras estaciones que sirven combustibles sintéticos cero emisiones. Las primeras ya están abiertas.
Desde julio del 2022, Repsol ha estado proporcionando diésel 100% renovable a diferentes compañías de logística y transporte de personas o maquinaria profesional. Un programa piloto que ahora se extenderá al resto de usuarios con el fin de reducir el impacto de la movilidad en el medio ambiente. La compañía española tiene varios frentes abiertos a la hora de apostar por un modelo energético sostenible, desde convertirse en un proveedor de electricidad hasta apostar por el hidrógeno y los combustibles sintéticos. Un abanico de soluciones que les permitirá seguir operando ante el nuevo paradigma nacional de movilidad.
Las primeras estaciones de servicio de Repsol que ofrecen combustible cero emisiones ya están abiertas. Las localizaciones exactas son: Mercamadrid (Madrid), Esparraguera (Barcelona) y Alcochete (región de Lisboa). El objetivo de la compañía es seguir regando la red ibérica de estaciones de combustibles. Para finales de este año esperan tener disponibles 50 estaciones de servicio y muchas más en los próximos años. El director general de Cliente de Repsol, Valero Marín, ha destacado: “este lanzamiento ejemplifica, una vez más, nuestro compromiso con la descarbonización del transporte, del que queremos hacer partícipes a nuestros clientes.”
Los combustibles renovables son aquellos que se producen a partir de materias primas renovables. Son cero emisiones netas y, por tanto, garantizan un menor impacto en el medio ambiente. Concretamente, los biocombustibles avanzados de Repsol se fabrican a partir de residuos orgánicos como aceites vegetales usados, grasas animales y residuos agrícolas y forestales que no se destinan a la alimentación. Asimismo, los combustibles sintéticos se obtienen a partir de CO2 capturado e hidrógeno renovable. Durante los próximos años esperan poder acelerar el proceso y ampliar su oferta de combustibles libres de emisiones.
Según los planes, en 2025 estará en disposición de poder fabricar 1.3 millones de toneladas de combustibles renovables y espera ampliar la producción a 2 millones de toneladas en 2030, lo que le posicionaría como la compañía líder en la distribución de combustibles sostenibles en España y en Europa. A lo largo de este año, Repsol pondrá en marcha la primera planta de la Península Ibérica dedicada a la producción de biocombustibles generados a partir de residuos. Será en las instalaciones de la compañía en Cartagena (Murcia), donde se producirán anualmente 250.000 toneladas que evitarán unas 900.000 toneladas de CO2 por año.
