Si por algo se podría caracterizar el presente año 2023 es por la sistemática bajada de tarifas en los coches eléctricos, especialmente de Tesla, quien ha sido portada de todos los medios al iniciar la famosa ‘guerra de precios’. Otros han querido seguirle el juego a Elon Musk, como Ford, por ejemplo, quien sí ha hecho fluctuar el precio de dos de sus coches eléctricos: el Mustang Mach-E y el F-150 Lightning. Sin embargo, otros fabricantes dan la espalda a esta jugada y no quieren oír hablar de esta estrategia de ventas.
Tal es el caso de Mercedes-Benz. Su CEO, Ola Kallenius, afirmó en una reciente entrevista con InsideEVs que no serán parte de este juego. El dirigente afirma que “siempre miras el punto de operación, la demanda y la oferta. En cualquier mercado. Pero los movimientos drásticos para una marca como Mercedes generalmente no son la vía adecuada a seguir. No es el camino correcto para nosotros”, aseguró.
El plan de estabilidad de Mercedes-Benz pasa ahora por China, el principal mercado del mundo de coches eléctricos. Sin embargo, el estado actual de la economía en todo el planeta está dificultando esta estrategia, así como el propio cambio hacia una gama 100% eléctrica, algo sobre lo que Kallenius no tiene dudas: “Para nosotros el destino está claro: la movilidad tiene que ser cero emisiones. No hay peros”, puntualizó.
Aunque también tuvo palabras para la el llamado ‘enfriamiento macroeconómico’ que están sufriendo muchas compañías, sobre lo cual asegura que “no es lo ideal, puesto que estamos invirtiendo decenas de miles de millones en esto, no solo en la electrificación, obviamente, sino en todo lo demás que está sucediendo en la industria automotriz”.
El CEO admite que un buen paso para incentivar el mercado eléctrico sería añadir nuevos modelos a su gama, aunque el gran desafío es China, donde la marca cada vez encuentra más competidores y, en general, este mercado está “un poco plano”. A esto, Kallenius añadió: “Como productor de automóviles, debemos decidir cómo va a jugar en el mercado en ese contexto. Asegurarnos de que estas máquinas que construimos tengan longevidad, valor residual, etcétera. Es para nosotros la máxima prioridad. Por esto, es tan relevante que siga nuestra estabilidad de precios”.
Asimismo, para Mercedes-Benz, parte de esta estabilidad en los precios requiere la capacidad de satisfacer las necesidades de sus usuarios igualmente después del cambio hacia mecánicas 100% eléctricas. “Podemos ir con el mercado. Lo mismo ocurre en Alemania, en China y en otros lugares del mundo. Así que sí, tenemos flexibilidad de producción, pero nos estamos preparando para un futuro con mucha más electrificación”.
No obstante, Mercedes-Benz sí que se acercará a Tesla en términos de hardware, ya que hace escasas semanas apuntó la compañía que emplearán el estándar NACS del enchufe de carga en Estados Unidos. Esta decisión, según el CEO no se tomó a la ligera: “Pensamos: ¿cuál creemos que es el escenario más probable en términos de cuál será el enchufe dominante en América del Norte? Después de un análisis llegamos a la conclusión de que la solución a medio y largo plazo será el NACS más que el CCS”. Sin embargo, puntualiza que antes de que este estándar sea el dominante habrá una coexistencia entre ambos tipos de enchufes.
