Las ventas de coches eléctricos siguen incrementándose en todo el mundo a pesar de que muchos indicadores apuntan hacia una ralentización del mercado. China se ha situado como el principal centro comercial del mundo. La competencia es tremenda y, ante tanta compañía nueva, las marcas tradicionales luchan por hacerse un hueco con sus vehículos impulsados a baterías. BMW sabe que sus coches tienen los argumentos suficientes como para luchar de tú a tú con cualquier rival, pero, a diferencia de estos, no plantea una agresiva estrategia comercial para aumentar su cuota de mercado.
El año comenzó con una fuerte guerra de precios en China. Con Tesla tirando del carro, las matriculaciones despegaron gracias a una reducción, en muchos casos drástica, en las tarifas. Sin embargo, esas rebajas no siempre suponen un éxito para las marcas ya que el margen de rentabilidad cae de forma importante. Cuesta mantenerse ajenos a semejantes políticas comerciales, pero BMW lo ha hecho y los resultados saltan a la vista. El 2023 está siendo un año récord para todas las marcas del grupo alemán, pero, principalmente, para la compañía de Múnich. El futuro es incluso más prometedor con su próxima generación de baterías.
En 2023, BMW ha duplicado las ventas de eléctricos a pesar de los precios
Las cifras le dan la razón a Oliver Zipse, CEO de BMW. El directivo ha sido muy tajante con respecto al precio de sus coches eléctricos durante una entrevista a Reuters: “no tenemos ningún interés en bajar los precios para ganar cuota de mercado. Esa no es nuestra estrategia”. Los de Múnich no son los únicos que piensan de esta manera. Hace tiempo, Ola Kallenius, máximo responsable de Mercedes, realizó comentarios similares, aunque en su caso las cifras demuestran que el año no está siendo tan bueno como esperaban. Mercedes vende coches eléctricos, pero no al ritmo esperado y en más de una ocasión han alzado la voz al respecto. Sobre todo, por la situación en Europa.
Más delicada es la situación del Grupo Volkswagen. Los de Wolfsburgo no dan con la tecla para vender masivamente sus vehículos eléctricos. Las ventas han crecido, pero Volkswagen necesita que lo hagan mucho más para cuadrar las cuentas de la compañía.
Los últimos análisis de resultados, relativos al tercer trimestre del año, dejan claro que BMW sí ha sabido enfocar su estrategia, aunque hay que reconocer que ellos fueron de los primeros en apostar por la electromovilidad con su i3. La experiencia es un grado y los clientes de todo el mundo saben reconocer que sus coches eléctricos nada tienen que desmerecer a los de la competencia. Se venden bien, aunque su precio no es el mejor.
En el último trimestre, el Grupo BMW (BMW, MINI y Rolls-Royce) entregó un total de 93.931 coches eléctricos, lo que representa un excelente 15% del volumen total de negocio. Si tomamos como referencia el curso anterior, el balance es realmente positivo con un incremento del 80%. Está siendo un año de récord. Entre enero y septiembre, el conglomerado ha colocado 246.867 unidades eléctricas en todo el mundo, un 93% más que el año anterior. Sólo BMW ha mejorado su volumen en un 119,3%. Todas las regiones aumentan las matriculaciones, aunque en China han experimentado una ligera caída. A pesar de ello, el propio Zipse ha dejado claro que su estrategia de precios no va a cambiar.
