La semana pasada estuvimos en París (Francia) conociendo el nuevo Citroën AMI. Un vehículo (que no coche, Citroën dice que esto no es un coche) eléctrico con el que, en palabras de la propia compañía, quieren hacer «accesible para todos» la movilidad eléctrica. En un artículo anterior ya os contamos toda la información sobre el Citroën AMI y ahora os traemos la opinión que nos mereció este vehículo, sus pros y sus contras, lo que nos gustó y lo que no.
Lo que nos gustó del Citroën AMI
1. Fácil de aparcar. Con sólo 2,41 metros de longitud y 1,39 metros de anchura, el AMI será fácil de aparcar en prácticamente cualquier rincón. De hecho, podría aparcarse en perpendicular a la acera sin causar más molestias. A eso hay que sumar un radio de giro de sólo 3,6 metros, por lo que puede girar en una baldosa, y una muy buena visibilidad desde el interior.
El Citroën AMI ofrece muy buena visibilidad desde el interior.
2. No se necesita carné de conducir. Para poder conducir un Citroën AMI no hará falta carné de conducir. Se puede manejar desde los 16 años y evita tener que desembolsar lo que cuesta sacarse el permiso de conducir. Eso sí, no podremos circular a más de 45 km/h.
3. Personalizable. Aunque sólo estará disponible en un color principal para la carrocería (el gris que véis en las imágenes), el AMI se podrá personalizar y configurar al gusto del cliente. Existen 4 colores para los acentos del exterior: naranja, azul, caqui y gris; y otros cuatro para los accesorios del interior. Las llantas se pueden elegir en varios colores y se le pueden poner pegatinas.
Mediante distintos accesorios, pegatinas y paquetes de estilo podemos personalizarlo al gusto.
Además se ofrecen dos paquetes de estilo, con diferencias en las molduras laterales, la parrilla delantera, el techo... El paquete Pop (con un estilo más fashion) y el Vibe, con una serie de accesorios que también se pueden personalizar e instalar una vez comprado el coche, incluyendo incluso un alerón trasero.
4. Te lo llevan a casa. Con la compra del AMI (que es 100% online), Citroën ofrecerá la posibilidad de entregarlo en la puerta de casa, como si de un paquete de Amazon se tratase. Una opción muy cómodo que llevarán a cabo en Francia, aunque está pendiente de confirmar si harán lo mismo en España.
Lo que no nos gustó del Citroën AMI
1. Tiempo de recarga. El Citroën AMI lleva un cable con enchufe Schuko convencional, escondido en un lateral del coche, como si de un electrodoméstico se tratase. El vehículo viene con el cable incorporado y no por separado. En una toma doméstica (230 V y 2,3 kW de potencia máxima) necesita 3 horas para cargarse, tiempo tras el cual tendremos otros 70 km de autonomía. Evidentemente no pretendemos que cargue al mismo ritmo que un Tesla, pero 23 km de autonomía por hora es una cifra muy mejorable -sobre todo si Citroën quiere vender este coche a flotas de carsharing-.
El Citroën AMI viene con el cable incorporado, que está escondido en un lateral.
2. Precio para jóvenes. Citroën ha presentado este coche bajo el lema 'Electrificación para todo el mundo', ya que en Francia costará solamente 6.900 euros (6.000 con ayudas del gobierno). La marca hizo hincapié en los jóvenes, poniendo de relieve que, de media, en Francia cuesta unos 1.800 euros sacarse el carné de conducir y supone el primer escollo para tener coche. Y si bien es cierto que el AMI tiene un precio muy contenido, ¿cuántos jóvenes están realmente dispuestos a gastarse casi 7.000 euros en un cuadriciclo en lugar de un coche de segunda mano con el que poder viajar por carretera?
3. Acabados. Una de las consecuencias directas de ofrecer un precio lo más ajustado posible es que hay que reducir gastos en muchos sitios. El Citroën AMI tiene una partel frontal y trasera simétricas (así se aprovechan los mismos paneles de carrocería y carcasas de los faros), y en el interior todo son plásticos duros. Incluso el acolchado de los asientos es el justo. Eso sí, las puertas se abren al estilo de los Porsche más deportivos, tirando de un asa textil.
El habitáculo tiene unos acabados que denotan el enfoque 'low-cost' del coche.
4. ¿Cambios en la movilidad personal? Otro de las frases clave de Citroën para este producto (recordemos que no quieren denominarlo 'coche' bajo ningún concepto) fue que propone cambios en la movilidad personal. Sin embargo, y bajo mi opinión, el concepto de movilidad que entendemos tradicionalmente cambia poco: un vehículo de cuatro ruedas que, como máximo, puede llevar a 2 personas. Eso sí, lo hace sin emisiones de gases contaminantes.
