Para los vehículos que cuentan con la etiqueta ambiental B de la Dirección General de Tráfico (DGT) se abre una nueva fase de restricciones a partir de 2026. En paralelo al avance de la Ley de Movilidad Sostenible y la implantación cada vez más amplia de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en las grandes ciudades como Madrid, Barcelona y Bilbao se establecen nuevas condiciones para las etiquetas.
La etiqueta B, identificada con distintivo amarillo, corresponde a los coches de gasolina matriculados a partir de 2001 y diésel desde 2006 en adelante, así como a vehículos comerciales ligeros con criterios similares. Hasta ahora, estos vehículos tenían una posición relativamente cómoda en las restricciones urbanas: podían circular en la mayoría de ZBE con menos limitaciones que los más antiguos o sin etiqueta ambiental.

Los cambios clave a partir de 2026
La Ley de Movilidad Sostenible, aprobada por el Congreso de los Diputados y remitida al Senado para su tramitación final, no prohíbe expresamente la circulación de coches de una etiqueta concreta, pero otorga a las administraciones municipales y autonómicas mayores facultades para endurecer las restricciones en función de la calidad del aire y los objetivos de descarbonización.
El principal efecto de la nueva fase es que la etiqueta B deja de ser un distintivo neutro y pasa a formar parte de un calendario progresivo de exclusiones urbanas. Ciudades y regiones ahora están configurando calendarios propios que limitan la presencia de estos coches en las ZBE conforme avanzan los años.
El resultado es un mapa desigual de restricciones en el que un mismo coche con etiqueta B puede circular sin mayores problemas en una ciudad y enfrentarse a vetos en otra, dependiendo de la legislación y de la fase de implantación de cada ZBE. Aunque no existe una prohibición estatal única, la movilidad en España hacia 2026 y más allá estará cada vez más definida por la transición hacia vehículos más limpios y las políticas locales de calidad del aire, con los coches eléctricos como alternativa preferente para el acceso urbano sostenible.

Barcelona, por horarios
En Cataluña, por ejemplo, el Plan de Calidad del Aire 2027 establece que desde el 1 de enero de 2026 los coches con etiqueta B no podrán circular en las ZBE durante episodios de alta contaminación autorizados por normativa. Esta prohibición será gradual: para 2028, estos vehículos quedarán totalmente excluidos de todas las ZBE catalanas de manera permanente, similar al tratamiento que ya tienen hoy los coches sin etiqueta.
En Barcelona, esto significa que durante 2026 los coches con distintivo B todavía podrán acceder a la ZBE Rondas BCN en condiciones normales, pero su circulación quedará vetada en los horarios y situaciones que se active la restricción por contaminación, especialmente en días de picos de dióxido de nitrógeno (NO₂). Si bien la implantación es progresiva, la tendencia es clara: la movilidad urbana quedará cada vez menos abierta a los modelos más contaminantes de la flota.
Madrid, una polémica prórroga
La capital española sigue un camino diferente. En 2026, los coches con etiqueta B podrán seguir circulando por la ZBE de Madrid sin prohibiciones generales adicionales, y se ha anunciado una prórroga específica para residentes que aún conducen vehículos con mayores emisiones. No obstante, el acceso en áreas de especial protección, como el Distrito Centro, ya está sujeto a condicionantes (residente, aparcamiento o autorización específica) que estrechan el margen de maniobra de estos coches.
Este planteamiento refleja una estrategia gradual que, aunque menos restrictiva que la catalana, sugiere un endurecimiento progresivo con el tiempo. La tendencia a nivel urbano es que la etiqueta B pierda peso como instrumento de acceso libre, incluso en ciudades que no han adoptado calendarios explícitos de prohibición.
Bilbao, prohibiciones
Ciudades como Bilbao han ido más allá: desde junio de 2025 los vehículos con etiqueta B están ya fuera del acceso y estacionamiento en su ZBE en horario laboral, salvo excepciones muy concretas.
Esta medida pionera anticipa lo que podría ocurrir en muchas otras urbes conforme se implementen y ajusten sus ZBE.
| Ciudad / Zona | Acceso en 2026 | Restricciones específicas | Notas clave |
|---|---|---|---|
| Madrid (ZBE municipal general) | Sí — pueden circular sin restricciones adicionales en 2026 | No prohibiciones generales; acceso amplio en la mayoría de la ZBE | ZBE de Madrid permite circulación de etiqueta B; restricciones solo en áreas especiales como Distrito Centro |
| Madrid (ZBEDEP Distrito Centro / Plaza Elíptica) | Condicionado según área | Requisitos de acceso (residente o autorización específica) | Zona de especial protección, normas más estrictas que en el resto de Madrid |
| Barcelona (ZBE Rondas BCN) | Sí — con condiciones | Prohibición durante episodios de alta contaminación | 2026 permite circulación habitual, pero no en días de picos de NO₂; prohibición total desde 2028 |
| Bilbao (ZBE) | No — vetado en horario laboral | Circulación y estacionamiento vetados entre 7:00 y 20:00 h en días laborales | Medida activa desde junio de 2025; indica tendencias más estrictas |
Impacto sobre el mercado
Los cambios introducidos en 2026 no constituyen una prohibición estatal inmediata para los coches con etiqueta B, pero sí marcan un punto de inflexión en la movilidad urbana española. La presión normativa aumentará la necesidad de planificar el uso de estos vehículos, especialmente para quienes circulan habitualmente en centros urbanos grandes.
Para los propietarios de coches térmicos con esta etiqueta, las normas específicas de cada municipio pueden traducirse en multas, dificultades para aparcar o en la práctica en una pérdida de funcionalidad del vehículo en determinados entornos, empujando a muchos conductores a considerar alternativas más limpias.
La evolución de las etiquetas ambientales está siendo acompañada por cambios en la forma en que se calculan estos distintivos. Desde 2026 la DGT aplicará criterios de emisiones más estrictos, incorporando resultados de pruebas tipo WLTP que reflejan consumos y emisiones más realistas en condiciones de uso real. Esto puede hacer que algunos vehículos actualmente clasificados en categorías superiores como ECO o C vean su posición revisada en futuros listados.
El endurecimiento de las ZBE y la progresiva limitación de los coches con etiqueta B ofrece ventajas para los vehículos eléctricos e híbridos, con etiquetas ‘ECO’ o ‘0 emisiones’ con mayores ventajas de acceso urbano. Este empuje normativo se alinea con los objetivos de reducción de emisiones y de fomento de la movilidad limpia: los eléctricos puros siguen siendo los únicos que garantizan libre acceso continuo a las ZBE más restrictivas.