Pocas cosas hay más impresionantes que pisar a fondo el acelerador de un Porsche, pero depende del escenario. El Infierno Verde es uno de los trazados más peligrosos y delicados del mundo. Escenario de cientos de batallas, la variante norte de Nürburgring se ha establecido como el mejor laboratorio de pruebas para las marcas. La inmensa mayoría de los coches nuevos ensayan sus características en la pista, pero también se ha convertido en el estándar mundial en cuanto a prestaciones. El segmento de los coches eléctricos tiene un nuevo rey o, mejor dicho, vuelve a recuperar a un rey: el Porsche Taycan.
Desde hace años vivimos una intensa rivalidad entre Porsche y Tesla. Ambos fabricantes se han enfrentado repetidas veces en los 20,8 kilómetros del Nordschleife con el objetivo de coronarse como el fabricante más rápido del mundo. En 2021, Tesla fue la primera en fijar una marca con el Model S más extremo del momento. Un impresionante registro de 7:35.579 minutos. Por entonces, se convirtió en uno de los coches de producción en serie más rápidos del mundo, hasta que, apenas un año más tarde, los alemanes corrigieron la afrenta.
El Taycan se acerca peligrosamente al Rimac Nevera
El primer Taycan Turbo S demostró su valía reduciendo el tiempo de vuelta hasta los 7:33.950 minutos. Apenas un par de segundos de diferencia que, en el mundo de la competición, suponen la frontera entre la victoria y la derrota. Sin embargo, la historia, como podrás imaginar, no acabó ahí.
Tesla, tras lanzar al mundo el Model S Plaid de 1.020 caballos, volvió a enfrentarse a las 76 curvas del Nordschleife con la intención de batir a sus rivales y así fue. Una mejora de 8 segundos con respecto a su máximo contrincante, 7:25.231 minutos. Todo el mundo daba por hecho que dicho registro iba a tardar en superarse, pero no ha sido así.
Apenas seis meses después, con Lars Kern al volante, Porsche ha vuelto a la carga y lo ha hecho de una forma que resultará muy difícil superar. El Taycan pronto recibirá una actualización, un restyling de mitad de ciclo comercial que, entre otras cosas, mejorará el rendimiento de una berlina eléctrica que ya era excelente. Saldrá a la luz en los próximos meses, pero como adelanto ya se ha autorregalado el premio al coche eléctrico más rápido de Nürburgring. El nuevo tiempo a batir es 7:07.550 minutos. Nada más y nada menos que 18 segundos menos que el récord que había vigente y 26 segundos menos que la marca anterior obtenida por un Taycan en agosto de 2022.
Hay que tener en cuenta que estamos ante un modelo de preserie modificado para la ocasión. El Taycan 2024 todavía no ha entrado en fase de producción. El propio Kern ha reconocido que ha ido tan rápido como le ha sido posible. Sin más. Una vuelta a cara o cruz que, por suerte, ha salido bien. Hay que tener en cuenta a otros rivales para valorar el registro del nuevo Taycan.
En agosto de 2023, el Rimac Nevera, el coche eléctrico más extraordinario del mundo, fijó el tiempo récord para un eléctrico en los 7:05.298 minutos. Su extraordinario rendimiento es apenas un par de segundos más rápido que el de un Taycan, una berlina familiar que llevada al límite es capaz de dejar a todo el mundo atrás. Actualmente, el coche más rápido del Infierno Verde es el Mercedes-AMG One con una marca de 6:35.183 minutos.
