Una nueva marca de motos aparece en escena y lo hace presentando un scooter diseñado para ciudad con un agresivo diseño y mucha personalidad. Se denomina Sarkcyber HC200 y es un modelo de tecnológica apariencia que ya ha empezado a comercializarse en Europa.
Lo ha hecho, sin embargo, de momento tan sólo en Italia, aunque es de esperar que más adelante vaya desembarcando poco a poco en el resto de países.
Como casi es norma en el segmento de los scooters eléctricos de carácter urbano, el HC200 alberga un esquema eléctrico que ,por los números que arroja y las prestaciones que logra, lo convierten en un equivalente a 125. En esta ocasión, no lleva su potencia pico hasta el territorio de un 250 o 300 centímetros cúbicos, como sí sucede con estos modelos.
La HC200 confía en un esquema eléctrico compuesto por un motor posicionado en el buje de su rueda trasera (una solución de corte económico) que, de manera nominal, rinde una potencia de 2,5 kW, lo que equivale a 3,4 CV. El dato que impera en la experiencia de conducción, por contra, es su potencia máxima, que llega a ser de 4 kW o 5,4 CV.
Es un dato modesto, pero suficiente para ámbito urbano. Prueba de su enfoque eminentemente urbanita es su velocidad máxima, ya que alcanza los 85 kilómetros por hora. En realidad, son muchos scooters eléctricos los que están limitados a velocidades similares con tal de no sacrificar autonomía.
La batería que alimenta el conjunto está compuesta por un único módulo extraíble que sitúa su capacidad en los 2,7 kWh. Un dato, de nuevo, muy habitual en el segmento. Otros scooters eléctricos que hemos probado y que hacen uso de exactamente la misma capacidad de batería son, por ejemplo, la Wellta Ártica y la Super Soco CPX, ambas fabricadas por el mismo fabricante. Y es que Sarkcyber es una nueva firma del gigante chino VMoto.
Con una carga completa de su batería, será capaz de ofrecer, según la marca y siempre en ámbito urbano, un total de 75 kilómetros. De acuerdo con nuestra experiencia con este tipo de motocicletas, se trata de un dato cercano al real, siempre y cuando no se aborden vías rápidas.
Lo realmente interesante acerca de scooters eléctricos como la HC200 reside en el irrisorio coste que tiene su consumo, ya que otras motos eléctricas de potencia y batería similares que hemos puesto a prueba promedian, en uso real, unos 30 kilómetros de autonomía por cada kWh de batería. Lo que se traduce en que, si se lleva a cabo la carga en horas de bajo coste energético, cada ciclo costará apenas unos céntimos.
En Italia, el único país al que de momento ha llegado, tiene un precio de 4.390 euros. Allí ha dado comienzo su comercialización de la mano de la empresa que comercializa Keeway.
