Cuando Polestar se independizó de Volvo tenía claro que iba a apuntar a un nicho de mercado todavía más pequeño que el de la marca premium sueca. Sin embargo, tras varios lanzamientos que la han posicionado como una firma de alto rendimiento, considera que ha llegado el momento de lanzar un producto que consiga mayores volúmenes de ventas, el Polestar 7.
Anunciado a principios de año, no se lanzará al mercado hasta 2027, pero poco a poco va apareciendo nueva información sobre el vehículo. Ahora ha sido el propio Michael Lohscheller, CEO de Polestar, el que ha querido despejar dudas hablando sobre él con Autocar.
Seguirá siendo un Polestar
El hecho de cambiar el enfoque para ser un modelo que busque llegar a un público mayor genera dudas sobre el hecho de que el nuevo integrante de la gama pueda perder parte de su esencia premium, pero Lohscheller no lo ve así: “No, porque nos aseguraremos de incorporar el ADN Polestar. Esa es la tarea clave de nuestros equipos de I+D: asegurar que el ADN Polestar, en cuanto a la puesta a punto del chasis, el comportamiento, la apariencia y la sensación, se integre y se comporte como un Polestar”.
La compañía todavía no ha concretado ni el tamaño que tendrá, más allá de que será un modelo compacto, ni si utilizará su plataforma propia o, para abaratar costes, tomará prestada alguna del Grupo Geely. Es por eso que es fácil pensar en el Volvo EX30, el modelo más pequeño del fabricante sueco, que gracias a un precio más contenido está teniendo un notable rendimiento comercial. Sin embargo, el CEO, sin concretar si estará basado en éste, explica que incluso modelos de ambas marcas que están muy relacionados entre sí, se sienten como vehículos muy diferentes gracias al trabajo de sus ingenieros.
Para ello pone el ejemplo de los Polestar 3 y Volvo EX90, que comparten la misma plataforma: “Si comparamos el Polestar 3 con el EX90, diría que su ejecución es excelente. El Volvo es cómodo y seguro, cómodo y fácil de usar para ir al trabajo; el Polestar es un coche de alto rendimiento; se nota en su conducción. La suspensión es diferente, el ajuste del chasis es diferente”.
Así, es de esperar que, aunque tenga el precio más bajo de la gama y su enfoque comercial sea más abierto a un público mayor, la puesta a punto deportiva siga estando presente y le diferencie de otros modelos de Geely.
Un diseño evolucionado
El Polestar 7 también supondrá un cambio de dirección en materia de diseño, puesto que Philipp Römers, Director de Diseño de la marca, ha señalado que van a empezar a crear coches menos minimalistas.
Como ocurre también con Volvo, los modelos de Polestar se han caracterizado por un diseño muy limpio, sin apenas recargo, pero que se traducía en modelos con mucha presencia. A partir de ahora, parece que tendrán una imagen algo más intrincada.
“El diseño es de suma importancia. [El 7] necesita un diseño muy atractivo, obviamente al estilo Polestar. Quizás un poco más de confianza de cara al futuro, y el rendimiento también es fundamental. No diría que es diferente. El diseño está en constante evolución. Se desarrollará, especialmente con un nuevo jefe de diseño, pero diría que mantendremos los principios básicos del diseño escandinavo, aunque quiero tener un poco más de confianza”, concluye Lohscheller.
Se ha confirmado que el Polestar 7 se fabricará en Europa, aunque la localización exacta de su producción no se desvelará hasta dentro de unas semanas. Sea el lugar que sea, el movimiento conseguirá que el modelo se libre de los aranceles a los coches eléctricos importados de China, algo clave en un vehículo que, dentro de los estándares de Polestar, será el más barato de su gama para poder llegar a un público mayor.
Aunque se vaya dando información con cuentagotas, la espera para su llegada todavía va a ser larga, puesto que hasta 2027 no está previsto su lanzamiento al mercado.