El verano es una estación del año que es particularmente interesante en todo lo que se refiere a la movilidad. Se sabe que el calor extremo no es positivo para el coche eléctrico y que, por supuesto, deben tomarse una serie de precauciones a la hora de ponerse al volante con temperaturas extremas. Ahora bien, ¿sabías que, por ejemplo, no se recomienda dejar una botella de agua en el habitáculo? Al parecer, este elemento puede incrementar notablemente las probabilidades de sufrir un incendio.
Es cierto que tienen que darse una serie de condicionantes, pero es algo que puede ocurrir. La recomendación es evitar, al menos, que la botella tenga agua en su interior, ya que el efecto lupa puede desencadenar en un fuego en el interior del vehículo. Veamos, por tanto, qué es lo que puede ocurrir y por qué merece la pena tener en cuenta esta recomendación.
Por qué no es aconsejable dejar una botella de plástico con agua en el coche
El agua es capaz de concentrar la luz en un punto determinado. Dicho de otro modo, puede actuar como una lente, haciendo que los rayos solares se concentren en un espacio concreto. Esto puede ser muy peligroso, ya que puede elevar la temperatura de dicho lugar hasta los 200 grados centígrados. Como habrás podido comprobar en estudios anteriores, dependerá, además, del color que tenga la superficie de destino, ya que si es blanca se consigue aislar el calor de forma más efectiva.
If a plastic bottle is left in your car and the right amount of sunlight hits it at just the right angle, a car seat could catch fire. This video shows how
— Massimo (@Rainmaker1973) June 1, 2023
[Midwest City Fire Department: https://t.co/VqmX6jnkwJ]pic.twitter.com/hQkl52c1Fp
¿Qué es lo que ocurre con una botella situada en un espacio mal ubicado? Las anteriores imágenes muestran a la perfección lo que ocurre. Tal y como se puede observar, el efecto lupa permite quemar el papel tras una breve exposición. ¿Puedes imaginar qué ocurriría, por ejemplo, sobre una tapicería de piel tras unas horas produciéndose este reflejo? Las posibilidades de incendio son reducidas, pero lo cierto es que podría producirse un incendio.
La recomendación es clara. Si es posible, evita dejar una botella en el habitáculo. Por otro lado, puedes dejarla en el habitáculo, pero no en un lugar que pueda ser objeto de luz directa del Sol. De esta forma, se conseguirá que no se produzca el reflejo mencionado anteriormente. Dejar la botella en el suelo o cubierta con un trapo pueden ser otras alternativas que evitarán el riesgo de incendio.
Aun así, lo cierto es que no se recomienda dejar una botella de plástico expuesta al Sol. Al parecer, micropartículas de plástico pueden terminar en la bebida. Por este motivo, la mejor opción es evitar dejarse un recipiente de estas características dentro de un habitáculo que muy posiblemente alcanzará temperaturas superiores a los 50 grados centígrados tras un par de horas de exposición directa a la luz solar.
