Hace tiempo que nos hacemos eco de las noticias relacionadas con el fabricante de motos eléctrica Ola Electric, porque lo cierto es que el proyecto tenía un gran potencial para crecer por todo el mundo. Pero la situación se le ha complicado incluso antes de poder salir de India.
El producto lo tienen, porque ya demostraron ser capaces de producir un scooter eléctrico muy barato, el Ola S1, pues su precio en el mercado local no llega a los 1.000 euros. Lo que ocurre es que las cosas se han torcido, y ahora la empresa está sumida en una crisis de la que parece que no hay escapatoria posible.
Los clientes no están contentos

Al menos así lo reflejan los resultados que está obteniendo el negocio durante este año 2025, y parte de la culpa lo tiene el hecho de que los clientes han tenido problemas graves con la S1. Entre los más importantes, se han comunicado fallos eléctricos y en el sistema de suspensión, situaciones que han dejado tirados a los motoristas.
Y el servicio de taller no ha sabido estar a la altura, pues algunos propietarios de unidades de la Ola S1 tuvieron que esperar varias semanas hasta que se reparó su moto, lo que ha llevado a muchas quejas y a una irremediable mala publicidad para el fabricante indio. Pudimos leer incluso una noticia de India en la que se hablada de un cliente de Ola que estaba tan enfadado que prendió fuego a un concesionario de la marca.
Las pérdidas de Ola en los últimos meses

Tal vez no estaban preparados para un crecimiento tan rápido en el país, o quizá no hay tan buena relación calidad-precio como se prometía. La realidad es que Ola perdió 104 millones de dólares durante el primer trimestre de 2025, que es mucho más que los 50 millones de dólares en pérdidas que registró en el mismo período de 2024.
Con las ventas reducidas un 55% en los últimos meses, el escenario se plantea muy difícil para Ola Electric, pues no podrá aguantar mucho en pérdidas, y al fin y al cabo debería haber seguido una tendencia positiva para que su futuro esté asegurado.
No sabemos lo que pasará a corto y medio plazo, y si podremos vivir el lanzamiento de las nuevas motos planteadas por Ola (también para Europa), pero lo que está claro es que luchar contra fabricantes como Bajaj, Hero, Suzuki u Honda, entre otros grandes representantes de la industria de la moto, no es fácil.
Hay que tener en cuenta que, pese a que estos últimos avanzan más lentos en algunos casos en cuanto a electrificación se refiere, tienen un sólido capital para mantenerse a flote mientras las motos eléctricas terminan de acomodarse en el sector, como ya han hecho los coches eléctricos.