La Generalitat valenciana ha aprobado la concesión de un total de 9,3 millones de euros a Ford para inversiones sostenibles en la fabricación del nuevo Kuga y el desarrollo de un modelo piloto de híbrido enchufable, con el objetivo de posicionar la planta de Almussafes (Valencia) como "referente en Europa" en el desarrollo de vehículos eléctricos, según ha anunciado la portavoz del Gobierno valenciano en funciones, Mónica Oltra.
La aprobación de los convenios -nueve millones para el Kuga y 300.000 euros para el proyecto piloto- llega después de que la firma automovilística estadounidense anunciara este lunes que eliminará alrededor del 10% de su fuerza laboral en todo el mundo, unos 7.000 empleos, para finales de agosto, como parte de su plan de reestructuración, sin concretar si afectarían a la factoría española en Almussafes.
Los 9,3 millones de euros autorizados este viernes se suman a los 11 millones que destinó la Generalitat el pasado mes de abril a la firma del 'ovalo' para fabricación de motores e innovación. En los últimos años ya concedió 13 millones (2018), ocho millones (2017) y nueve millones (2016), como ha recordado la vicepresidenta.
Con estas ayudas, Oltra ha destacado que Ford Almussafes supone "un motor para la economía valenciana, no solo en la creación directa de empleos, sino sobre todo indirecta", por lo que "el soporte a esta actividad es importante y apunta hacia el futuro". Ha asegurado así que el Consell confía en que tengan un impacto positivo en el mantenimiento de la fábrica y de los puestos de trabajo.
El apoyo va enfocado a la producción sostenible y a "otro tipo de movilidad y de vehículos". "El futuro se abre por ahí, no se trata tanto de la fabricación como hasta ahora, sino de mantener los puestos de trabajo y orientarlo hacia la sostenibilidad", ha subrayado la vicepresidenta a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa tras el pleno semanal.
Reforzar la competitividad con el 'kuga'
En concreto, el primer convenio para inversiones sostenibles en la fabricación del nuevo modelo de vehículo Ford 'Kuga' persigue reforzar la competitividad y el empleo tanto de la planta como de los proveedores establecidos en el área industrial de Almussafes. Cuenta con nueve millones de euros para 2019.
El objetivo es respaldar iniciativas estratégicas de inversiones productivas sostenibles y mejorar los procesos y productos de alto contenido tecnológico, nivel de complejidad, proyección de futuro e impacto medioambiental, con una "mejora sustancial" en la oferta y los procesos actuales.
Paralelamente, pretende potenciar la formación, el empleo y, con ello, el capital humano, con vistas a que el personal de la planta y sus proveedoras adquieran nuevas cualificaciones y conocimientos por la mayor complejidad de la fabricación.
Híbrido electrificado de carga y descarga
Por otro lado, la Generalitat ha autorizado otros dos convenios con Ford por 300.000 euros para el proyecto piloto demostrativo y de I+D con vehículos electrificados de transporte de mercancías, para realizar operaciones de carga y descarga y transporte de pasajeros en ciudades de diversa índole.
Se trata de una iniciativa de fomento del uso de soluciones del ámbito TIC (tecnologías de la información y la comunicación) para entornos urbanos. En este caso, el escenario piloto sería el área metropolitana de València, con vistas a su fabricación en serie para toda Europa. La idea es poder replicarlo en un futuro en otras ciudades y entornos de la Comunitat.
El proyecto supone tanto la compra de vehículos y piezas prototipo como la realización de pruebas y test piloto, el desarrollo de aplicaciones, la obtención de datos y la generación de informes. La meta es apoyar las plataformas de 'smart cities', telemetría y servicios asociados al nuevo ecosistema, así como una nueva estructura de servicios y otras iniciativas de movilidad sostenible.
El modelo PHEV (híbrido enchufable) será fabricado posteriormente en serie con la intención de desplegarlo por Europa, al hilo del objetivo de Ford de llegar al 100% de vehículos de este tipo en entornos urbanos. Desde la Generalitat destacan que se trata de una actuación de "gran envergadura con enorme impacto en la Comunitat Valenciana".
En materia medioambiental, contribuiría a disminuir el tráfico de vehículos contaminantes en el área metropolitana de València, además de a aumentar la calidad del aire y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera.
Paralelamente, el Consell prevé que tenga un efecto tractor sobre otras empresas, pymes valencianas, centros tecnológicos y universidades por su potencial implicación, gracias a la transferencia de conocimientos y a la mejora de la formación y el empleo. También conllevaría una mayor competitividad en empresas de distribución de mercancías y transporte de pasajeros.