El marítimo es el sistema más empleado para el transporte de mercancías por el mundo. Cada día miles de barcos recorren los mares y los océanos de todo el planeta con las bodegas cargadas de todo tipo de materiales, materias primas y productos, entre ellos coches. China depende de esos transbordadores para colonizar el mundo del automóvil. Cada vez es mayor la flota de barcos RoRo -roll on/roll off- que surcan los mares. Uno de ellos ahora ha sufrido graves daños cargado hasta arriba de coches eléctricos totalmente nuevos.
Los barcos RoRo son cada vez más corrientes. Los puertos de todo el mundo reciben su visita de forma corriente. Las compañías navieras los fabrican rápidamente. BYD cuenta con una flota propia de transbordadores. El primer barco de la compañía entró en servicio a principios de 2024, hoy ya son cinco los grandes buques diseñados para transportar, en el mejor de los casos, más de 9.200 vehículos en un solo trayecto. De hecho, en China, parece haberse implantado una especie de carrera por tener el transbordador más grande de todos. MG acaba de fletar el suyo con capacidad para 9.500 vehículos.

El barco ha quedado abandonado frente a las costas de Alaska
El tránsito de barcos es muy habitual. En apenas unas semanas completan los viajes sin incidentes, aunque no siempre es así. Tal y como informan desde China, uno de los transbordadores, el Morning Midas, ha sufrido un grave incendio durante una de sus travesías a través del Océano Pacífico. El barco va cargado con 3.000 vehículos, entre ellos 800 coches eléctricos. Reuters informa que el incendio se ha declarado frente a la costa de Alaska. Los 22 miembros de la tripulación fueron evacuados sanos y salvos tras no poder extinguir el incendio.
El barco, con bandera de Liberia y construido en 2006, es operado a través de la empresa londinense Zodiac Maritime. Partió del puerto de Yantai en China el 26 de mayo en ruta a Lázaro Cárdenas, México. Según las primeras investigaciones, la tripulación observó humo saliendo de una plataforma llena de vehículos eléctricos, según la empresa naviera, aunque todavía no está claro qué marcas de coches había a bordo. Igualmente, se desconoce en qué medida ha quedado afectado el buque y si se han producido grandes defectos en el resto de vehículos que viajan a bordo.

De por sí, el fuego es el peor enemigo de un barco en alta mar. Los incendios provocados por un coche eléctrico suelen ser difíciles de extinguir y más peligrosos de abordar. Su extinción requiere hasta 36 veces más agua de lo habitual. Los fabricantes de coches emplean cientos de millones de inversión en fabricar baterías más estables y seguras. China ejecuta test de dureza muy exigentes y algunos avances se muestran prometedores. Renault ha patentado su propio sistema de extinción. Sin embargo, el temor a un incendio se vuelve viral ante cada caso. Los datos demuestran que los coches eléctricos son mucho menos propensos a salir ardiendo que un coche de combustión.