Voestalpine ha marcado un hito histórico con la producción y colocación del primer rail ferroviario fabricado usando hidrógeno, un material innovador que no genera emisiones de dióxido de carbono. La pieza se produjo como parte de un proyecto piloto en la planta de Donawitz, Austria, empleando una mezcla de chatarra y hierro puro reducido con hidrógeno obtenido de fuentes renovables mediante el proceso del HYFOR (Hydrogen-based Fine Ore Reduction).
Ese hierro fue fundido en la instalación de investigación en metallurgia TechMet y transformado en rail en el molino de laminación contiguo, conservando la resistencia y dureza exigida en aplicaciones ferroviarias. Este rail “verde” ya ha sido instalado en la estación central de Linz, Austria, como parte de la ampliación a cuatro vías de la línea Oeste entre Viena y Wels, lo que simboliza una transición tangible hacia infraestructuras ferroviarias más sostenibles.

La tecnología al servicio de la sostenibilidad
La tecnología empleada sustituye el uso de combustibles fósiles en el acero tradicional por hidrógeno como agente reductor, generando únicamente vapor de agua como residuo. Se trata del proceso de acería más limpio hasta la fecha.
Voestalpine ha calificado esta fabricación como “un avance histórico”. Forma parte de su programa greentec steel, cuyo objetivo es alcanzar emisiones netas de CO₂ cero en sus plantas para 2050. Como paso intermedio, prevé instalar hornos de arco eléctrico alimentados por energía verde en Linz y Donawitz a partir de 2027.
El proyecto cuenta también con respaldo del grupo minero Rio Tinto, que suministrará el 70% del mineral de hierro para una futura planta de acero sin emisiones, prevista para mediados de 2027 en Linz
Este rail no solo reduce la huella de CO₂ del material ferroviario, sino que valida una producción industrial viable de acero verde. La calidad del producto, que iguala la de otros carriles de voestalpine en dureza y resistencia al desgaste, demuestra que las infraestructuras cero emisiones no comprometen la durabilidad ni la seguridad.

Además conlleva una rápida logística. Es fabricado en Donawitz y entregado en pocas horas a Linz, lo que ejemplifica la eficiencia operativa y refuerza el mensaje de que la innovación sostenible puede encajarse en el ritmo del sector ferroviario.
Para el sector del transporte ferroviario, este desarrollo supone un paso clave en la reducción de la carbono de las infraestructuras, aportando coherencia a las políticas de movilidad limpia y energía verde.
Si deseas que amplíe con cifras adicionales, información sobre el futuro del greentec steel o comparativas con otras tecnologías verdes, estaré encantado de ayudarte.