Una ruta en bicicleta eléctrica puede ser inolvidable: bien por pasárnoslo muy bien o bien por sufrir innecesariamente. Y uno de los motivos de ese sufrimiento puede ser no llevar el equipamiento correcto en base a nuestras necesidades.
Si, por ejemplo, acertamos en la elección de la badana de nuestra prenda (ya sea un culote o un pantalón), la experiencia sobre nuestras bicicletas eléctricas será 'total', eso seguro. Y es que una buena badana para ciclismo aumenta el rendimiento y la salud del usuario.
Pero, ¿en qué debemos fijarnos a la hora de elegir una badana?
Pues la verdad es que no es una labor menor aunque, a día de hoy, las marcas de ropa ciclista nos lo ponen muy fácil. En general, la mayor parte de las marcas de ropa ciclista suelen echar mano de badanas fabricadas por especialistas, sobre todo si hablamos de prendas de calidad (y, evidentemente, de precios elevados).
Porque la primera recomendación que podemos hacer a la hora de elegir un culote o pantalón es no escatimar: nuestra comodidad (y salud) depende en gran medida de llevar una badana acorde a nuestras necesidades.
Como decíamos, son varias las marcas de badanas que hay en el mercado y que suelen ser las elegidas por los mejores fabricantes de ropa. Nos hemos centrado en una de las más conocidas y, sobre todo, la que más información pone a disposición de los usuarios. También es una de las marcas más elegidas por los distintos fabricantes de ropa: hablamos de Elastic Interface.
Elastic Interface: 40 bandanas para el hombre y 35 para la mujer
La marca posee en catálogo nada menos que 40 badanas diferentes para el hombre y 35 para la mujer. Así que aquí tenemos una de las primeras premisas que tenemos que tener en cuenta: elegir según el sexo. Y no es una cuestión del diferente diseño del pantalón o de los colores exclusivos según los gustos...
Puede sonar a obvia esa elección, pero hasta hace no mucho la oferta en ropa para mujeres era escasa y no era nada extraño que se utilizaran culotes de hombre.
Una badana para mujer tiene un diseño diferente: por ejemplo, el área del tramo pélvico ha sido diseñada para sostener la rotación de los huesos de la pelvis durante el pedaleo. El relleno ha sido proyectado siguiendo los específicos parámetros antropométricos de las mujeres.
Así, a simple vista, puede que no difieran de las badanas de los hombres pero la protección es distinta y específica: la densidad adecuada y el diseño específico para cada sexo protegen las áreas del cuerpo más expuestas a la presión y el rozamiento.
¿En qué más debemos fijarnos para elegir una badana?
Lógicamente, tenemos que tener en cuenta la disciplina ciclista que vayamos a practicar: no son iguales las exigencias en una bicicleta de carretera que de montaña o de Gravel. Por un lado, porque la posición sobre el sillín puede ser diferente y, por otro, porque hay disciplinas en las que, habitualmente, pasamos más horas subidos a la bicicleta que en otras.
Pero esa elección no debería ser un problema ya que no hay que andar eligiendo badanas, simplemente basta con hacernos con la prenda adecuada: a día de hoy existen culotes o pantalones específicos para cada modalidad y, además, con diferentes calidades en base a las horas que estimamos vayamos a estar montando en bicicleta.
El problema viene cuando tenemos diferentes bicicletas de distintas modalidades y no queremos tener 'miles' de prendas. Así que, en esos casos, ¿cómo elegir correctamente?
Elastic Interface dice que lo fundamental es no quedarse con la primera impresión: por ejemplo, probarse una prenda y no subirse a una bicicleta no es muy recomendable ya que, algo que de pie nos puede resultar cómodo, encima del sillín puede ser un 'suplicio'.
Así que es necesario probarnos la prenda en nuestro establecimiento de confianza y pedir que nos dejen subirnos a una bicicleta lo más parecida posible a la nuestra. Y tenemos que simular la postura para verificar que los puntos de mayor presión (zona perineal e isquiática) estén protegidos.
Tomar en cuenta las diferentes exigencias determinadas por las varias posiciones en el sillín; y es que en una bicicleta de carretera se suele mantener una posición continua sin embargo, en bicicleta de montaña, los movimientos (y cambios de posición) sobre el sillín son mayores.
Otro factor es la duración de nuestra actividad; para ello, las badanas han sido ideadas con densidades diferentes.
Características imprescindibles en una badana
Además de las especificaciones que podamos leer en las fichas de las prendas o también en lo que nos cuenten los responsables de los establecimientos, es importante saber que:
- Una badana ha de tener elasticidad: lógicamente, ha de adaptarse a nuestras necesidades. Y es algo que podemos probar cuando tenemos una prenda en nuestras manos. De nada sirve mucha protección si no se adapta a nuestro contorno.
- Y efecto memoria: por muy elástica que sea, si en cuanto dejamos de aplicarla una cierta compresión no vuelve con celeridad a su forma inicial, no va a protegernos durante el pedaleo como es debido.
- Gran transpirabilidad: esta característica es difícil de saber con solo tocar una badana. Así que es importante leer las especificaciones del fabricante. Y es que, gracias a la libre circulación del aire, la piel respira más y permanece más seca, por lo tanto, el resultado es mayor confort, menor sudor y menos irritaciones en la piel.
- Y, cómo no, una densidad elevada: una badana necesita una capacidad de soporte adecuada. Esta propiedad significa que las espumas de las badanas han de contrarrestar el peso al cual son sometidas, previniendo el aplastamiento;. Y en eso, cuanta más alta es la densidad, más peso o fuerza serán necesarios para deformarla. Para ello es importante contar con espumas de densidad elevada, sobre todo para los largos recorridos. Por ejemplo, Elastic Interface habla de una densidad del orden de 200 kg/m3 en su producto de mayor rendimiento (largas distancias), aunque posee en catálogo badanas desde 40 kg/m3 para usos esporádicos de la bicicleta.
Recomendaciones para el cuidado de las prendas con badana
Es importante realizar un correcto mantenimiento de las baddanas para prolongar su efectividad a lo largo del tiempo. Y lo que más las castiga es el lavado y secado. para ello es importante seguir unas directrices:
- Lavar antes de usar por primera vez. Tanto esa primera vez como el resto de los lavados, hacerlos, si es posible, a mano o en lavadora con programa delicado (30°C).
- Utilizar detergentes neutros y no agresivos, evitando los suavizantes (reducen la fuerza de sustentación de las espumas).
- Lavar inmediatamente la ropa después de haber sido utilizada: de esa manera evitaremos las 'agresiones' que puedan causar los efectos negativos del sudor.
- Evitar, en la medida de los posible, el secado en secadoras a temperaturas elevadas y con ciclos de tiempo elevado. Tampoco secar en fuentes de mucho calor (por ejemplo, encima de los radiadores).
Conclusión
Ya lo hemos comentado: no ser ‘tacaños’ a la hora de hacernos con un culote o pantalón. En este aspecto, podemos dejar de lado si queremos los diseños o los colores de moda y centrarnos en lo que realmente importa: en nuestra protección.
Elegir bien por sexo, por modalidad y por tiempo sobre la bicicleta. Desechar lo que nos resulte sospechoso, a ser posible. Y centrarse en productos de marcas reconocidas. Probarse las prendas antes de elegir. En fin, cuidarnos como ciclistas.
Más información en: Elastic Interface