La multinacional del sector de automóvil Stellantis, propietaria de marcas como Peugeot, Jeep, Citroën, Opel y Fiat, ha reportado una pérdida de beneficios netos de 2.300 millones de euros en el primer semestre de 2025. La noticia fue anunciada este martes por su nuevo CEO, Antonio Filosa, quien advirtió que el grupo deberá tomar "decisiones difíciles" para revertir la situación.
Los factores clave detrás del desplome incluyen la incertidumbre arancelaria global, la presión de los tipos de cambio internacionales, y una marcada caída en las ventas de vehículos comerciales ligeros en Europa, lo que provocó incluso el cierre de la planta de furgonetas en Luton, Reino Unido.
De beneficios récord a números rojos

En comparación con el mismo periodo de 2024, los resultados suponen un giro drástico: los beneficios netos cayeron desde los 5.600 millones de euros a números negativos, los ingresos se redujeron de 85.000 millones a 74.000 millones, y el margen operativo se desplomó del 10% al 0,7%.
Los descensos más severos se registraron en Norteamérica y Europa, los dos mercados principales del grupo. En Estados Unidos, las exportaciones se redujeron drásticamente debido a los nuevos aranceles impuestos por el presidente Donald Trump, mientras que en Europa las ventas de vehículos del segmento B no alcanzaron las expectativas. En conjunto, las pérdidas después de impuestos fueron de 10.100 millones de euros en Norteamérica y de 728 millones en Europa.
Sudamérica, el único respiro

No todo fueron malas noticias. En Sudamérica, Stellantis registró un aumento de 77.000 unidades vendidas, con 471.000 vehículos despachados y beneficios netos de 402 millones de euros, impulsados principalmente por el éxito de modelos como los Fiat Strada, Fastback y Argo en Argentina.
Filosa, que asumió el cargo en junio tras la salida de Carlos Tavares, no detalló aún qué medidas concretas tomará, pero aseguró que su equipo directivo actuará con determinación.
“El 2025 está siendo un año difícil”, afirmó, aunque se mostró optimista: “Vamos a corregir lo que está mal en Stellantis aprovechando lo que está bien: el talento de nuestra gente y los nuevos productos que ya están llegando al mercado”.
Sin embargo, Stellantis estima que los efectos de los aranceles continuarán afectando a sus finanzas, con pérdidas adicionales de 1.200 millones de euros previstas para lo que resta del año. Y eso que Europa y Estados Unidos han llegado a un acuerdo para bajar los aranceles de Trump a los coches europeos del 27,5 al 15%.