Aunque haya perdido parte del interés que generó hace unos años, el avance hacia la conducción autónoma en el mundo del motor sigue hacia adelante, de una manera progresiva y menos espectacular de lo que se preveía. Todas las marcas de automóviles están haciendo progresos en este campo, pero hay algunas que han hecho de la conducción autónoma una de sus señas de identidad o su seña de identidad. Es el caso de Tesla o de Waymo, que tienen aproximaciones diferentes a la materia y entre las que, si tiene que elegir, el CEO de Ford lo tiene muy claro.
Jim Farley ha hablado al respecto con la revista Fortune y señala que tiene cierto escepticismo con la manera que tiene la compañía de Elon Musk de enfocar la materia y que desde Ford están mucho más en la línea de su otro competidor.

“Tienes que ser muy cuidadoso”
Farley explica que “cuando se trata de una marca como Ford, cuando surge una nueva tecnología, hay que ser muy cuidadoso”, señalando que es muy importante la elección de las tecnologías que se usan para conseguir el comportamiento autónomo de los vehículos.
En este aspecto, los enfoques de Tesla y Waymo son diametralmente opuestos. La primera basa su FSD (Full Self Driving) en las cámaras que rodean al vehículo y en la inteligencia artificial, algo que tiene ventajas como que es mucho más barato, pero que para el CEO de Ford no está a la altura de lo pueden aportar los sensores láser: “Creemos firmemente que el lidar es crucial para la misión”.
Al ser preguntado por cuál de las dos compañías lo está haciendo mejor en esta materia, Farley lo tiene claro: “Para nosotros, Waymo”. Concede que tanto una como otra compañía han avanzado mucho en lo relativo a la conducción autónoma, pero considera que la diferencia tecnológica entre una y otra es insalvable ya que “donde la cámara estará completamente ciega, el sistema lidar verá exactamente lo que tienes delante”.
El CEO de la marca estadounidense concreta su postura estableciendo que, cuando se habla de una tecnología tan novedosa, a la que los usuarios no están acostumbrados, es necesario ganarse su “confianza” y que para ello hay que “ser muy cuidadosos” en el enfoque que se tiene.
La compañía está esperando para aliarse con otra marca experta en la materia para alcanzar los niveles de conducción autónoma más altos, pero actualmente ya dispone en algunos de sus modelos de la tecnología BlueCruise, un sistema de Nivel 2 que permite una conducción en la que los conductores pueden soltar el volante cuando se encuentran en autopista.
Tesla contra Waymo
Las dos empresas persiguen el mismo fin, pero por caminos completamente distintos. Tesla quiere democratizar la conducción completamente autónoma, motivo por el que la tecnología en la que basa su sistema es mucho más económica, mientras que Waymo prefiere un volumen mucho menor, pero utilizando tecnología más cara y avanzada.
El propio Musk puso de manifiesto las diferencias entre ambas en la presentación trimestral de resultados de Tesla en abril: “El problema con los coches de Waymo es que cuestan mucho más. El coche es muy caro y se fabrica en pequeñas cantidades. Los Tesla probablemente cuestan entre el 25% y el 20% de lo que cuesta un Waymo, y se fabrican en grandes cantidades”.
Se trata de una carrera de la que todavía no se conoce el resultado final, pero en la que cada competidor hace avances a su ritmo. En 2025 Tesla ha empezado a tener novedades y desde hace unas semanas ya ha activado su servicio de robotaxi en Austin, Estados Unidos, aunque de momento en un entorno bastante limitado.