Pese al desarrollo económico de las últimas décadas, lo cierto es que un importante porcentaje de la población sigue sin contar con acceso a agua potable y recursos energéticos. Afortunadamente, las innovaciones acontecidas en el plano tecnológico ha permitido contar con herramientas capaces de ser alternativas autosuficientes. De hecho, existe una nueva propuesta creada por la Universidad de Cambridge que podría acabar automáticamente con ambos problemas. La obtención simultánea de agua limpia y combustible es ya una realidad.
Se trata de un dispositivo que puede contar con diferentes tamaños y que es capaz de producir estos dos elementos fundamentales para el desarrollo de una comunidad. Además, su funcionamiento se produce gracias a la alimentación de la energía solar. Este prototipo aún se encuentra en fase de pruebas, pero ha demostrado ser una alternativa válida para su uso en situaciones de extrema necesidad.
Así es el dispositivo creado por la Universidad de Cambridge para obtener agua limpia y combustible
Publicado en la revista especializada Nature, esta investigación puede tener un gran potencial como elemento clave para el desarrollo económico de las regiones más pobres. Gracias a un proceso parecido al de la fotosíntesis que tiene lugar en la naturaleza, es posible obtener agua válida para el consumo y combustible. Tan solo se requiere agua extraída de cualquier espacio (sin distinción del grado de contaminación) y rayos solares.
Mediante un proceso puramente químico, se consigue separar la porción de agua pura respecto a la contaminación que posee. Para ello, se requiere la actuación de una fuente de calor. El Sol, en este sentido, juega un papel vital para la consecución del proyecto. Esta innovación destaca, además, por la incorporación de un material de color blanco para obtener la radiación de los rayos UV. De esta manera, es posible disfrutar de hidrógeno para su uso en el ámbito industrial.
La obtención de hidrógeno, además, podría ser utilizada para su consumo en el hogar. De esta manera, se conseguiría contar con un combustible útil para poder cocinar o para emplearlo como medio de calefacción o solución para la dotación eléctrica de una casa. Se trata, por tanto, de una propuesta que, a gran escala, ofrecerá recursos a poblaciones alejadas de las grandes ciudades en países pobres.
Esta investigación ha sido efectuada gracias a la dotación de fondos del programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea. Además, su consecución ha sido posible gracias a la colaboración del Consejo Europeo de Investigación, el Cambridge Trust, el Programa de Patrocinio Educativo Petronas y el Programa Winton para la Física de la Sostenibilidad. Se trata de una línea de investigación que, debido a sus buenos resultados, seguirá impulsándose con el objetivo de reducir la brecha entre los países desarrollados y los que aún se encuentran en vías de desarrollo.