La firma Livall ha destacado desde sus inicios (2014) por disponer de una alta carga tecnológica en sus cascos, convirtiéndolos en unos de los más seguros del mercado. Y del Livall BH51M Neo podemos decir que es la culminación de todo el saber de la marca. Su enfoque eminentemente urbano hace de él un accesorio muy recomendable para los ciclistas urbanos, pero también para otros usuarios como, por ejemplo, los de los patinetes eléctricos.
El Livall BH51M Neo ofrece tres niveles de protección, dos activas y una pasiva: visibilidad, comunicación y rescate. Este despliegue de medios le ha valido numerosos galardones, lo que lo ha convertido en el casco inteligente más premiado del mercado.
Y es que la protección activa (la que está ahí para prevenir accidentes) depende, en gran medida, de que seamos vistos entre el tráfico urbano, de nuestra visibilidad: para ello, el BH51M Neo incorpora un sistema de iluminación frontal (lo habitual en los cascos suelen ser luces traseras) que aumenta la visibilidad del ciclista entre el tráfico y que se activa de manera automática por un sensor que detecta la baja intensidad de la iluminación ambiente.
Complementando dicho sistema, se une otro trasero que tiene la particularidad de ofrecer también una luz de freno que funciona gracias a una acelerómetro que detecta la desaceleración y que activa dicha luz de freno durante 8 segundos. También se incorporan intermitentes que se manejan desde un pequeño ‘centro de control’ anclado al manillar.
Un motivo que resta mucha seguridad a los mandos de una bicicleta (y que está prohibido) es el uso de dispositivos electrónicos como los teléfonos móviles, bien sea hablando por ellos y escuchando directamente o con unos auriculares. Aquí entra en juego el segundo apartado, el de la comunicación, para lo que el Livall BH51M Neo instala unos altavoces estéreo (JBL) que, según la marca, “proyectan sonido por encima del oído sin bloquearlo”. Además cuenta con un micrófono (a prueba de viento), con lo que el ciclista puede atender llamadas, recibir navegación por voz o alertas de tráfico y meteorológicas, para lo que no tendrá que soltarse del manillar. De esta forma, como indica Livall, se cumple con la nueva normativa de la DGT.
En cuanto al apartado de seguridad pasiva, ofrece un sofisticado sistema de emisión de socorro que envía una señal de SOS mandando la posición mediante GPS a contactos de emergencia preestablecidos o a su compañía de seguros. Y también solicita atención en carretera en caso de un accidente o caída. Esto es ideal si el usuario queda incapacitado o inconsciente. Livall, por este sistema, recibió la distinción AXA Ponle Freno gracias a la eficacia demostrada salvando vidas.
Destacar también que la conectividad del casco está a un nivel diferente a lo conocido en este sector: gracias a los altavoces y al sistema Bluetooth incorporado, podemos disfrutar de funciones de nuestro Smarthphone, como escuchar música o programas de radio en formato podcast... También existe una App propia de Livall, la Livall Riding, compatible con Strava, iHealth y Siri, navegación GPS, etc. Esta App activa las funciones inteligentes del Livall BH51M Neo: podremos, mediante comandos de voz, hacer llamadas telefónicas, poner la música que deseemos o dar indicaciones al navegador.
El Livall BH51M Neo tiene un precio de 175 euros y se puede escoger entre dos colores (negro y gris) y dos tamaños disponibles (M y L).
Características:
- Luces LED brillantes e inteligentes.
- Indicadores de giro.
- Altavoces estéreo.
- Micrófono incorporado.
- Alarma antipérdida.
- Iluminación automática por sensor.
- Luz de advertencia de frenado.
- Carga magnética USB.
- Grado de impermeabilidad IPx4.
- Apagado automático.
- Duración de la batería 48 horas.
APP Livall
- Llamada telefónica/Música/Navegación por voz/Walkie-talkie.
- Detección de caídas/Pulsar para Alerta SOS.
