Tarde o temprano, todas las marcas van a acabar desarrollando sus propios coches eléctricos, ya sea de manera exclusiva o compartiendo plantel con otros tipos de sistemas de propulsión. Sin embargo, aunque es un camino que todos van a recorrer, ciertos casos generan más interés que otros. El de Aston Martin es uno de ellos. El fabricante va un poco tarde en materia de electrificación, pero precisamente por eso va a inspirarse en soluciones que ya hayan encontrado otros rivales, aunque estos no sean necesariamente premium o de lujo.
Marek Reichman, director creativo de Aston Martin, acudió a la Monterey Car Week, donde CarBuzz tuvo un momento con él, que aprovecharon para preguntarle sobre la electrificación de la marca británica y sus futuros coches eléctricos. Dejó varias perlas bastante interesantes, empezando por una declaración bastante directa: “Estamos desarrollando coches eléctricos de batería, pero su futuro está más lejano”.

El primer paso es el Valhalla
Eso no significa que la compañía no esté manos a la obra ya en esta materia, como explicó: “En cuanto al futuro de la electrificación, por supuesto, debemos considerarla. Es algo que todas las empresas estarán considerando. Algunas ya lo están haciendo. Hemos decidido que el primer producto que cumpla con algunos de esos criterios es un híbrido enchufable en el Valhalla”.
El hermano pequeño del Valkyrie es un ejemplo muy claro sobre como Aston Martin entiende la electrificación para potenciar el rendimiento. Es un híbrido enchufable que combina un motor 4.0 V8 biturbo de 828 CV con otros tres motores eléctricos para conseguir un rendimiento total de 1.079 CV y 1.100 Nm. Sumando a la ecuación la tracción integral y la transmisión automática de doble embrague y ocho marchas, el resultado es una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,7 segundos y una velocidad máxima de 350 km/h. De esta manera, el apartado eléctrico se utiliza para potenciar al de combustión, mientras que la eficiencia es secundaria, ya que con su pequeña batería solo puede circular en modo eléctrico durante 14 km.
Utilizar lo mejor que esté a su disposición
Reichman tiene claro cual es el camino para avanzar rápido y con garantías en esta nueva rama. Dado que, dentro de lo que cabe, Aston Martin es una compañía pequeña, es lógico acudir a expertos en la materia para beneficiarse se su saber hacer y de sus productos.
“Usamos frenos Brembo porque son simplemente los mejores en la fabricación de frenos. Entonces, ¿por qué no usar los mejores del mundo en la fabricación de motores eléctricos y baterías? Es exactamente lo mismo. Existe una relación, pero no se trata solo de una cadena de suministro. Tenemos una estructura de propiedad compartida entre nuestra empresa y la suya”, comenta.

De esta manera, señala que no tendrán problema para tomar prestadas ideas de otros fabricantes, siempre que éstas funcionen y aporten algo positivo a sus vehículos. Al preguntarle por la posibilidad de incluir sonidos y cambios de marcha simulados, como ocurre en los Hyundai Ioniq 5 N e Ioniq 6 N, para que la transición hacia los modelos de cero emisiones de sus clientes sea menos chocante, Reichman lo tiene claro.
“Si mejora la capacidad de conducción de nuestros coches, y por lo tanto es auténtico y real, y podemos utilizar un sistema que permita al conductor experimentar más emociones al volante, entonces sí. Pero si es algo puramente artificial, entonces no. Porque un Aston Martin es de verdad, es auténtico. Hay pocas compañías en el mundo de la Fórmula 1 que venden coches de carretera. Tenemos una enorme ventaja”, comenta.
“Imaginen el conocimiento, los datos que recopilamos y cómo podemos usarlos para hacer un coche de carretera más emocionante. Ya sea con las marchas o con alguna forma de usar la vectorización del par para generar interacción, estamos totalmente integrados en una experiencia de conducción emocionante”, concluía.