Ya hemos podido ver, tocar y conducir el nuevo Honda ZR-V, el SUV de Honda para el segmento C que tiene como objetivo competir contra rivales duros en el ámbito comercial como el Hyundai Tucson, el KIA Sportage, el Renault Austral o el futuro Toyota Corolla Cross.
Se trata, pues, de un importante modelo para la marca que no viene a sustituir a ningún integrante en la gama de Honda, sino que ha llegado al mercado para cubrir el hueco que queda entre los veteranos, pero recién renovados Honda CR-V (D-SUV) y HR-V (B-SUV).
Sus medidas así lo confirman. Mide 4,57 metros de largo, 1,84 de ancho y 1,62 de alto, mientras que la distancia entre ejes se sitúa en los 2,26 metros.
En vivo, se percibe como un SUV más grande de lo que cabe esperar, algo más corpulento, incluso, que, por ejemplo, un Renault Austral. Parte de la culpa la tiene el diseño de su frontal, con un generoso volumen delantero marcado por el capó alto y plano, pero también es cierto que mide casi 10 centímetros más que el modelo francés y unos 11 más que un Toyota Corolla Cross.
En este sentido, Honda sigue apostando por coches con más longitud de lo normal para cada segmento, algo que pasa tanto con el Civic como con el HR-V, que se desmarcan con su largo de la competencia más directa.
Estas cotas exteriores, y tal y como sucede también en su hermano menor (el HR-V), no se traducen en un maletero de dimensiones y capacidad superiores a los de la competencia. El ZR-V anuncia 380 litros en la versión Sport y 370 en el Advanced (ya que, bajo el piso del maletero, en esta versión hay un subwoofer que resta espacio). Ofrece, pues, un buen espacio de carga en términos generales, pero significativamente inferior a los 616 litros del Hyundai Tucson (la referencia en la categoría) o los 430 del Renault Austral híbrido.
A nivel técnico, la parte más importante de la arquitectura del ZR-V parte de la base del Civic. Esto significa que la sección frontal de la estructura del ZR-V, donde se coloca el grupo propulsor y la suspensión delantera, es la misma que la del compacto japonés, aunque disfruta de una mampara específica que conecta la sección delantera con la central y trasera, que esta vez la hereda de manera directa del CR-V (que, a su vez, también se basa en la del Honda Civic).
Como no podía ser de otra manera, el ZR-V será propulsado por un sistema híbrido, el mismo que, de nuevo, ya se encarga de mover al ya mencionado Civic. Se trata de un dueto conformado por un motor de gasolina de ciclo Atkinson, atmosférico, de dos litros de cilindrada y de un motor eléctrico que rinden 140 y 184 CV, respectivamente. Es el segundo dato, el de la potencia del motor eléctrico, sobre el que recae la responsabilidad, aunque sobre esto trataremos en unos días.
Una sólida puerta de acceso al habitáculo nos da acceso a un interior que no tiene un diseño tan llamativo como el de un Hyundai Tucson o un Renault Austral, por ejemplo, pero que compensa desde el primer momento con una sensación de orden muy superior y una calidad percibida muy alta.
En este sentido, se puede decir que el ZR-V es muy japonés: cuida la ergonomía y la calidad de construcción y materiales en los lugares en los que es importante. Por esto mismo, rivaliza sin ningún tipo de complejo con la calidad interior de las consideradas marcas prémium, especialmente la de Mercedes o Audi.
Gama y precios del Honda ZR-V para España
Honda ha querido que la gama de su C-SUV en España sea muy simple, lo que hace el proceso de compra mucho más fácil. A su único motor en oferta, se le suma la opción de elegir entre dos líneas de equipamiento distintas denominadas Sport y Advance. La que nosotros hemos probado es la primera, que a su vez es la más simple y la que representará el escalón de acceso a la gama.
Que se trate de la más barata no implica que estemos ante una línea de corte sencillo, todo lo contrario. De serie el ZR-V Sport contará con un despliegue de equipamiento que, para los que valoren la relación entre lo esencial y el precio, hará muy difícil justificar dar el salto a la versión Advance.
Y es que contamos ya de partida con llantas de 18 pulgadas en color negro mate, iluminación completa con tecnología LED, asientos calefactables delanteros y ajuste eléctrico, conexión con Android Auto y Apple CarPlay, apertura automática del portón trasero, acceso y arranque sin llave y cargador inalámbrico para teléfonos. También con todo el conjunto de tecnologías de seguridad Honda Sensing.
Por encima, la versión Advance añade techo panorámico practicable, sistema de sonido Bose, llantas en doble tono, cuadro de mandos completamente digital (la Sport cuenta con un velocímetro analógico y una pantalla adherida a este de 7 pulgadas), luces adaptativas y tapicería completa en símil de piel (mixta con tela en el Sport).
Como todavía no ha sido confirmado el precio del ZR-V, aún no sabemos lo que costará cada versión, aunque se conocerá en las próximas semanas. Las entregas, por su parte, están previstas para el mes de octubre.