Faconauto considera que España tiene ante sí una oportunidad decisiva para consolidar la recuperación del mercado automovilístico y avanzar en la transición hacia la movilidad sostenible. La patronal del sector ha reclamado que el Gobierno active “de inmediato” el Plan Auto+ y el Plan Nacional de Renovación del Parque, tal y como establece la nueva Ley de Movilidad Sostenible, que fija un plazo máximo de tres meses para su puesta en marcha.
Según la organización, la convivencia de ambos programas sería clave para sostener el empleo, reducir desigualdades territoriales, retirar los vehículos más contaminantes y acompañar a los ciudadanos en el proceso de electrificación. Su presidenta, Marta Blázquez, ha asegurado que su activación permitiría recuperar un mercado de 1,3 millones de unidades, volumen considerado imprescindible para garantizar la competitividad de la industria y mantener las inversiones vinculadas a la electrificación.

“Tenemos, por primera vez, un marco legal que acompaña los objetivos industriales y de descarbonización. Ahora toca ejecutarlo”, ha señalado Blázquez, que define estos planes como “la herramienta que conecta la transición ecológica con la realidad económica de los ciudadanos”.
Un 2025 impulsado por la electrificación y los planes autonómicos
Faconauto ha hecho balance de la evolución del mercado en 2025, un ejercicio que cerrará cerca de 1,2 millones de matriculaciones. La patronal identifica tres factores determinantes para explicar este repunte.
El primero es el avance de la electrificación, que ha alcanzado casi el 25% de cuota, apoyado en un marco de incentivos más estable que en años anteriores y en una oferta eléctrica y electrificada percibida como más accesible gracias al mayor despliegue de puntos de recarga, ya integrados en el mapa Reve.

El segundo elemento ha sido la reposicón derivada de la DANA, canalizada mediante el Plan Reinicia Auto+, que permitió a miles de familias sustituir sus vehículos dañados en un corto periodo de tiempo.
El tercer impulso ha llegado de la mano de los planes autonómicos de renovación del parque, que demostraron su capacidad para dinamizar la demanda en el territorio y corregir desigualdades. “Las comunidades autónomas han sido decisivas para llegar a las clases medias y cerrar brechas como la campo-ciudad, la social o la de movilidad”, ha subrayado Blázquez.
Sin estas medidas, según la patronal, el mercado habría perdido hasta 120.000 operaciones, situándose en niveles similares a los de 2024.
2026: el año de la consolidación
Faconauto prevé que 2026 será un ejercicio clave. Con un contexto económico más favorable (mayor renta disponible, inflación moderada y tipos de interés más bajos), existen dos escenarios posibles: 1,25 millones de matriculaciones en un crecimiento moderado o 1,3 millones si se activa la batería de incentivos prevista.
En paralelo, la organización considera plenamente viable alcanzar una cuota de electrificación del 33%, siempre que se mantengan las ayudas, se despliegue masivamente la infraestructura de recarga y lleguen al mercado más modelos con precios competitivos.
La patronal ha adelantado que ya trabaja en el nuevo Plan Auto+, que seguirá el modelo de agilidad y simplicidad administrativa del programa valenciano Reinicia Auto+.
Blázquez ha afirmado que "Europa apuesta por la descarbonización, pero ha dejado de lado a la industria y a los clientes. Europa tiene sí o sí que hacer sus deberes y tiene que entenderse con China de una forma diferente cuanto antes para establecer un marco de trabajo a medio/largo plazo".
Concesionarios: empleo estable pero márgenes mínimos
En lo referente a la red de distribución, Faconauto calcula que el sector cerrará el año con cerca de 165.000 empleos. Sin embargo, recuerda que los concesionarios continúan trabajando con márgenes reducidos, en torno al 1,4%, y afrontan un déficit creciente de talento, especialmente en el área de posventa. “La oportunidad está ahí, pero solo si actuamos ahora”
Blázquez ha concluido remarcando que España vive una “ventana de oportunidad única” para consolidar su competitividad industrial. “Tres meses es el plazo máximo que marca la Ley y también la ventana para lograr resultados reales. No deberíamos desaprovecharlo”.