No es ningún secreto que China ha despuntado como una de las piezas fundamentales de la era eléctrica. El país alberga más de 100 fabricantes diferentes haciéndose la competencia entre sí. Muchos modelos y marcas pelean por hacerse un hueco en un mercado que muchos analistas empiezan ya a considerar saturado. Cuesta diferenciarse del resto. Sin embargo, eso no ha sido ningún impedimento para Xiaomi. Una de las mayores empresas del sector de la tecnología que ahora puede decir que también es una de las compañías más influyentes en la industria del automóvil. Todo ello tras haber lanzado su primer coche hace apenas unos meses.
Durante mucho tiempo se estuvo especulando sobre el posible lanzamiento de un coche eléctrico desarrollado por Xiaomi. Muchas otras empresas del sector habían planteado el salto a las cuatro ruedas, pero ninguna de ellas ha alcanzado la posición de los chinos. Apple ha estado trabajando durante más de una década en el desarrollo de un coche que finalmente ha sido descartado. Más de 10.000 millones de dólares invertidos tirados a la basura. Los últimos rumores aseguran que Apple podría asociarse con Rivian para el desarrollo conjunto de vehículos. Caso similar es el de Google. Muchos rumores y pocas confirmaciones para un coche que jamás verá la luz.
Un éxito sin precedentes que seguirá creciendo gracias a un SUV
Se puede decir que Xiaomi ha cosechado éxito donde sus rivales han perdido. A finales del año pasado presentaron oficialmente el Xiaomi SU7, su primer coche eléctrico. Una berlina que ha captado a la perfección las necesidades de los clientes. Aunque no lo parezca, su tamaño es similar al de un Model S o un Porsche Taycan, modelos contra los que, repetidas veces, Xiaomi ha querido posicionar al SU7. A pesar de adentrarse cómodamente en el segmento D, un mercado de no tanto volumen como las categorías inferiores, su éxito ha sido rotundo al poder ofrecer mucho a un precio realmente contenido.
Ni que decir tiene que su tecnología está fuera de toda duda. Xiaomi integra sus mayores y mejores avances en un habitáculo bien presentado y, tal y como aseguran desde China, cómodo y espacioso. A nivel mecánico ofrece versiones entre los 295 y los 664 caballos de potencia con una autonomía máxima homologada de 668 kilómetros (ciclo CLTC). Por tamaño, potencia, tecnología y autonomía, el SU7 debería valer en torno a los 80.000 euros, pero no. La tarifa básica es de 215.900 yuanes, apenas 27.700 euros al cambio de moneda. Es más barato que un Tesla Model 3. Ante semejantes cifras no es de extrañar que los chinos hayan acudido raudos a los concesionarios. Las ventas son asombrosas desde el primer momento.
Las reservas se acumularon rápidamente en los puntos de ventas. En apenas unas horas, Xiaomi había vendido toda la producción del primer año. La fábrica ha tenido que buscar soluciones para aumentar la producción, a pesar de que son capaces de ensamblar un coche cada 76 segundos. Al mes de iniciarse la producción ya son 10.000 las unidades ensambladas y entregadas. No habíamos visto algo así en mucho tiempo, sólo con modelos de pequeño tamaño y precio mucho más asequible, como el BYD Seagull. La historia del SU7 no tiene precedentes y tal es el éxito que Xiaomi ya puede decir que está entre las grandes.
Las cifras no dejan lugar a dudas, ya es el octavo mayor fabricante de coches eléctricos de China. En Abril se vendieron más de 7.000 unidades del SU7 en los concesionarios del país y la esperanza es cerrar el presente año con más de 100.000 unidades entregadas, a una media de 11.618 matriculaciones mensuales. De alcanzarse semejante volumen, Xiaomi podría situarse al mismo nivel de Volkswagen. Los alemanes han completado 13.108 ventas en el pasado mes de abril. Mucho más lejos están Tesla, con más de 31.000 unidades matriculadas en abril, y BYD con 120.234 ventas durante los 31 días de abril. Los analistas estiman que la relevancia de Xiaomi seguirá creciendo durante los próximos meses y años. La compañía ya prepara su segundo producto, un SUV, al igual que ya está tomando las decisiones necesarias para cruzar las fronteras. España será uno de los primeros países europeos en disfrutar del SU7.
