La energía eólica está teniendo un fuerte impacto en el mundo, por lo que cada vez hay más molinos generadores de electricidad. No obstante, esto tiene también una serie de limitaciones. ¿Qué es lo que ocurre con aquellas unidades que ya han completado su vida útil? Mientras que la mayor parte de la estructura está formada por metales, las palas son difícilmente reciclables debido a los componentes que poseen. Por este motivo, una start-up ha decidido reutilizar este material como elemento decorativo en parques y jardines.
Esta iniciativa está teniendo una gran acogida debido al aluvión de unidades que deberán ser reemplazadas a lo largo de los próximos años. Existe un compromiso de algunos de los grandes productores de introducir materiales sostenibles, pero hasta la fecha, no se ha llevado a la práctica esta promesa. Precisanente por eso, propuestas como la realizada por Canvus permite dar una segunda vida a un material que conlleva un gran trabajo su eliminación completa.
Convertir palas de turbinas eólicas en otros productos para que no terminen en vertederos
Uno de los grandes problemas de la tecnología eólica es el proceso de eliminación de algunos de sus elementos imprescindibles. Las turbinas eólicas están hechas de materiales ligeros que tienen un proceso de reciclaje muy difícil. Su eliminación, por tanto, queda muy condicionada, por lo que proyectos como el desarrollado por Canvus permite a las empresas deshacerse fácilmente de esta tecnología. Se trata de una política muy interesante que permite crear todo tipo de mobiliario, desde bancos hasta mesas de picnic.
Esta empresa, situada en Ohio, Estados Unidos, dispone de una superficie de 10.200 metros cuadrados, lo suficiente como para almacenar toda una serie de palas de turbinas eólicas que han sido parcialmente desmontadas. El procedimiento para crear el mobiliario de uso público es muy sencillo, ya que basta con cortar el material (generalmente una aleación de fibra de vidrio) al mismo tiempo que se moldea una figura determinada.
Este tipo de trabajos está teniendo un gran impacto en el mercado, ya que la cantidad de palas que han terminado en vertederos o siendo incineradas se ha reducido contablemente. De hecho, de acuerdo con la información de Bloomberg, tan solo en el año 2022 se consiguieron reutilizar hasta 1.000 palas generadoras de energía. El número de empleados que se encarga del trabajo de esta tecnología asciende a 30 artesanos, los cuales cortan en piezas más pequeñas el material para su posterior tratamiento mediante un sistema 3D.
En cuanto al perfil de cliente de esta compañía, en su mayor parte se trata de firmas corporativas y entes públicos. Cada una de las piezas tiene un valor que discurre entre los 3.500 y los 9.500 dólares dependiendo de la complejidad de la obra. Se trata de una opción interesante para evitar que este material termine abandonado o siendo quemado, provocando unas emisiones contaminantes graves para el medioambiente.
