La carrera por dominar el mercado de vehículos eléctricos de bajo coste se intensifica, y Ford no quiere quedarse atrás frente al creciente dominio de las marcas chinas, que actualmente lideran en precios tanto en híbridos como en eléctricos puros. En este contexto, Jim Farley, CEO de Ford, ha confirmado que la compañía ya trabaja en una estrategia para lanzar un modelo competitivo en precio, que marcará el inicio de una nueva era para el fabricante norteamericanom, aunque aún tardará en llegar al mercado.
Un nuevo vehículo eléctrico como respuesta a BYD
El futuro modelo será un pick-up eléctrico de tamaño medio, fabricado en suelo estadounidense, y diseñado con el objetivo de reducir al máximo los costes de producción. Según Farley, será capaz de competir directamente con vehículos como el BYD Shark, un referente entre los pick-up eléctricos del gigante chino y que todavía tiene pendiente su lanzamiento en Europa, aunque ya lo ha hecho en algunos países de Sudamérica.

Farley aseguró que el proyecto permitirá a Ford igualar los costes de producción de cualquier fabricante chino que ensamble en México en el futuro, una referencia directa a la creciente presión geopolítica y arancelaria promovida primero por la administración Biden y que, después, está siendo duramente reforzada bajo el mandato de Donald Trump.
Lanzamiento previsto para 2027
Aunque el plan está en marcha, el calendario es exigente. El nuevo modelo, conocido internamente como "Proyecto T3", no se presentará hasta finales de 2027. Esto implica que Ford deberá enfrentarse a una competencia que evoluciona rápidamente, especialmente desde Asia, donde marcas como BYD o MG ya están consolidando su posición con productos cada vez más sofisticados y asequibles.

Para entonces, Ford contará con una nueva plataforma eléctrica destinada a diversos modelos de la gama y con baterías LFP (litio-ferrofosfato) de producción propia, que comenzarán a fabricarse en Michigan a partir de 2026. Esta tecnología permitirá reducir costes y mejorar la eficiencia, pilares fundamentales del proyecto.
Un modelo estratégico para la rentabilidad
Aunque la fecha de lanzamiento aún está lejos, Ford ya tiene una estimación clara de lo que costará construir este pick-up eléctrico. Según Farley, el análisis financiero ya está hecho y el proyecto es viable desde el punto de vista de la rentabilidad.
El nuevo modelo se ensamblará en la planta de Tennessee, y estará orientado a un mercado que, para 2027, estará aún más influenciado por la tecnología china y sus agresivas políticas de precios.