El futuro de SEAT se perfila como uno de los temas más controvertidos en el mundo del motor. Con la transformación del mercado hacia la movilidad eléctrica y la hibridación, la firma española se encuentra en una encrucijada en la que deberá adaptarse a las nuevas demandas sin perder su esencia.
Las pistas actuales apuntan a una reestructuración que permita a SEAT posicionarse como una compañía de vehículos asequibles o, incluso, como un referente en movilidad eléctrica dentro del Grupo Volkswagen. Esto llega en un momento en el que, recientemente, la marca decidió clausurar MÓ, su división de vehículos eléctricos más asequible, lo que añade un matiz interesante a la estrategia global de la empresa.

Wayne Griffiths pone fin a las especulaciones. O no
En una entrevista concedida hace unas semanas a Autocar, el CEO de SEAT y CUPRA, Wayne Griffiths, dejó claro que la compañía necesita una remodelación significativa para seguir siendo competitiva en un mercado que exige cada vez más opciones respetuosas con el medio ambiente. Según Griffiths, aunque SEAT no se desvía de su objetivo de alcanzar las cero emisiones, es imprescindible ser flexibles y ofrecer una gama variada de sistemas de propulsión. Así, el directivo enfatizó la importancia de responder al 90% del mercado, que actualmente demanda motores de combustión eficientes, híbridos e híbridos enchufables.
Actualmente, el catálogo de SEAT se compone de cinco modelos: Ibiza, Arona, León, Ateca y Tarraco. Sin embargo, la estrategia de la firma contempla un futuro distinto para cada uno de ellos. Se sabe que el SUV más grande, el Tarraco, será retirado en cuanto llegue al final de su ciclo vital. De igual manera, el Ateca podría seguir un destino similar, y el León se vería destinado a formar parte exclusivamente de la marca CUPRA. Por otro lado, los modelos que se mantienen con mayor futuro a largo plazo son los dos más pequeños y populares: el Ibiza y el Arona.
Estos dos vehículos, que han conquistado a muchos usuarios por su diseño y versatilidad, serán actualizados a lo largo del presente 2025. La novedad principal de estas actualizaciones será la incorporación de nuevas mecánicas electrificadas mediante un proceso de hibridación ligera. Griffiths comparó este proceso con lo que hizo Volkswagen con el Polo, destacando que extender el ciclo de vida de estos productos no solo pasa por cumplir con normativas como la Euro 7, sino también por responder a una demanda de modelos híbridos que, hasta ahora, ha estado insatisfecha.
La apuesta por la hibridación no debe interpretarse como un alejamiento de la movilidad eléctrica. Al contrario, se trata de una estrategia para ofrecer alternativas a aquellos clientes que aún no están listos para dar el salto completo a los vehículos eléctricos. "No nos vamos a desviar de la electrificación como objetivo. No cuestionamos el objetivo de llegar a las cero emisiones lo más rápido posible", aseguró Griffiths, subrayando la necesidad de no ser dogmáticos y de no obligar al público a adoptar una única tecnología. Esta flexibilidad es clave para atender a un mercado diverso y en plena transformación.

Dentro de esta estrategia, la llegada del CUPRA Raval, prevista para finales de este año, podría marcar un antes y un después en la democratización del vehículo eléctrico. Griffiths destacó que la introducción de coches eléctricos urbanos más pequeños y económicos, con un precio inferior a los 25.000 euros, puede ser el factor decisivo para que la movilidad eléctrica despegue. Mientras tanto, la oferta de SEAT seguirá siendo variada, abarcando tanto vehículos eléctricos como aquellos que aún dependen de sistemas de combustión.
El CEO también dejó claro que SEAT y CUPRA tendrán roles diferenciados en el futuro del Grupo Volkswagen. Mientras CUPRA se enfocará claramente en el desarrollo y comercialización de vehículos totalmente eléctricos y fuertemente electrificados, SEAT se mantendrá con su línea de vehículos de combustión, aunque con un enfoque hacia la hibridación en sus modelos más emblemáticos. "Estamos buscando tener dos marcas: CUPRA, claramente enfocada en vehículos totalmente eléctricos y electrificados, y SEAT enfocada en la combustión. Creo que actualmente tenemos lo mejor de ambos mundos", afirmó Griffiths.
Además, la estrategia a medio plazo contempla la introducción de una versión propia del futuro Volkswagen ID.1, el modelo eléctrico más asequible del conglomerado, que se lanzará alrededor del año 2027. Este nuevo vehículo permitirá cumplir con la ambiciosa propuesta de ofrecer “un coche eléctrico por debajo de 20.000 euros”, lo que podría suponer un cambio radical en el acceso a la movilidad eléctrica para un público más amplio.