Mini es una de las marcas más queridas del panorama automovilístico europeo. Una marca con historia y un largo historial de éxitos que ha sabido reconstruirse a cada paso del camino. Hoy está considerada como una de las marcas más pijas o chic del momento. Bajo el paraguas del Grupo BMW, la compañía inglesa ataca diferentes frentes en muchos mercados del mundo. Ahora, los chinos empiezan a disfrutar del último Mini eléctrico. Acaba de ser presentado en el país y nada más conocerlo nos ha entrado la envidia. Es igual que el europeo, pero mucho más barato.
Si ahora mismo decidimos irnos a un concesionario de Mini en España nos daremos cuenta, no sin cierto susto, que el modelo eléctrico de tres puertas tiene un precio mínimo de 29.345 euros. Es una tarifa muy alta para un coche que apenas mide 3,86 metros, tiene tres puertas y prácticamente nada de espacio en la parte trasera. La segunda generación eléctrica del Mini es bastante mejor que la primera, pero al igual que esta resulta excesivamente cara. En el mejor de los casos entrega 400 kilómetros de autonomía homologada (WLTP) y esa versión cuesta, como mínimo, 31.845 euros sin ayudas.
13.200 euros de diferencia de precio entre China y Europa
No es difícil encontrar en el mercado coches eléctricos de precio inferior y más altas aptitudes. Al fin y al cabo si quieres un coche eléctrico de pequeño tamaño, firmado por una de las marcas más icónicas de la industria del automóvil, solo tienes el Mini eléctrico. Es la tarifa que hay que pagar por acceder a él. Sin embargo, si miramos al modelo chino se abren ante nosotros muchas dudas de por qué resulta tan caro el modelo europeo. La división de Mini en China acaba de anunciarlo con un precio promocional de 153.800 yuanes, apenas 18.637 euros tras aplicar el cambio de moneda. Unos 13.200 euros de diferencia con el europeo.
El Mini eléctrico chino se fabrica en China, igual que el europeo, con la salvedad de que la marca tiene que pagar aranceles especiales por cada uno de sus coches que arriban a nuestras costas. Además del precio del transporte y de que en Europa las tarifas son más altas, el resultado es que los europeos estamos castigados con 13.200 euros adicionales. No vayas a pensar que el Mini chino es diferente al europeo, porque no es así. Se fabrica en las mismas líneas de montaje de la planta que Great Wall Motors tiene en la localidad de Zhangjiagang, al este de China, a poca distancia de Shanghái. Misma fábrica, mismos materiales y misma tecnología.
En cambio, sí hay diferencias en lo que a mecánica se refiere. La versión de 2026 que ahora se ha presentado en el Lejano Oriente viene equipada con una batería ternaria de litio de 51,5 kWh de capacidad que ofrece hasta 456 kilómetros de alcance eléctrico (ciclo CLTC). El modelo europeo ofrece baterías de entre 40,7 y 54,2 kWh de capacidad bruta con la que homologa entre 300 y 400 kilómetros de autonomía (ciclo WLTP). La potencia de carga sigue siendo un problema para usarlo como coche de viaje. Con una potencia máxima de 90 kW en corriente continua tarda 30 minutos en cargar del 10% al 80% de su batería.