Porsche es una marca que siempre se ha caracterizado por su puesta a punto deportiva por encima de todo y en la totalidad de sus modelos. La llegada de una gama eléctrica a la familia viene condicionada por el mantenimiento de estos principios. Sin embargo, existe un problema: el elevado peso que presentan los coches eléctricos. Algo que en Porsche no están dispuestos asumir.
Según han podido saber en el medio The Drive gracias a una entrevista con Frank Moser, vicepresidente de Porsche, la marca ha diseñado especialmente el nuevo Porsche 718 Cayman eléctrico para que mantenga un peso por debajo de su competencia más directa.
A Porsche no le queda más remedio que sacrificar una característica
“No queremos ganar el campeonato de autonomía”, afirmó Moser en su intervención. “Necesitamos una buena autonomía, sin duda, pero ese no es el coche para conducir de Múnich a Hamburgo (alrededor de 800 kilómetros). Será un rango adecuado, pero, como dije, lo más importante para mí es mantener el peso bajo en los deportivos de dos puertas, incluso con electrificación”.
Los responsables de la marca deberán trabajar sobre esta difícil decisión. Las baterías de los coches eléctricos actualmente aún representan un destacado porcentaje en el peso total del conjunto. Para los futuros 718 Boxster y Cayman deberán escoger paquetes que equilibren peso y autonomía, algo no tan sencillo a día de hoy.
Actualmente, el único eléctrico comercializado por la marca es el Taycan, que cuenta con dos opciones de batería: 79,2 y 93,4 kWh. Pese a que su volumen es significativamente alto, el modelo no presume especialmente por contar con altas cifras de autonomía, lo que supone todo lo contrario a lo que la marca espera alcanzar para los 718 eléctricos.
El principal problema del Taycan es su elevado peso ya que, aún con el paquete de baterías más pequeño, cuenta con un total de 2.070 kilos. Contrariamente, desde Porsche esperan que el 718 Cayman no supere los 1.500 kilos en su versión más pesada. Esto supone una rebaja de más de 500 kilos con respecto a la berlina deportiva eléctrica actual. Bien es cierto que el Taycan es significativamente mayor en todos los aspectos, pero buena parte de dicho total se corresponde a la batería.
Sin embargo, Porsche espera llevar a cabo un profundo trabajo de ingeniería para los próximos años que estará muy presente en los 718 eléctricos. “El peso debe ser lo más bajo posible. No podemos fabricar un deportivo de dos puertas y dos toneladas”, afirmó Moser. “Para nosotros, la herencia de todos nuestros coches deportivos es que son ligeros. Ese es el objetivo principal, mantener el peso bajo. Pero tenemos que considerar las cuestiones reglamentarias, relativas a las regulaciones de choque, protección de peatones, etc. Eso hace que los coches sean más pesados. Es realmente muy difícil desarrollar coches realmente ligeros”.
Porsche espera plantar cara a modelos como el Toyota Supra o el Alpine A110 con un deportivo eléctrico que pueda equiparar su peso al de sus rivales con mecánicas térmicas. La presentación oficial de los nuevos 718 eléctricos debería llevarse a cabo a lo largo del próximo 2025.
