Los directivos europeos advierten: la industria automovilística china descontrolada

China es un mercado que a día de hoy está desatado en cuanto a lanzamiento de nuevas marcas y modelos eléctricos, algo que el propio país oriental quiere ‘frenar’ debido a varios factores.

Actualmente, el mercado chino está dominado por BYD y el Grupo Geely como principales exponentes.
Actualmente, el mercado chino está dominado por BYD y el Grupo Geely como principales exponentes.
23/01/2024 11:10
Actualizado a 23/01/2024 12:56

En los últimos tiempos, los principales directivos de compañías automovilísticas europeas han puesto el grito en el cielo más de una vez con los precios que presentan los coches eléctricos chinos y lo que ello implica para la industria histórica del Viejo Continente. Responsables como Carlos Tavares, CEO de Stellantis, ha afirmado en numerosas ocasiones que no pueden competir contra China por precios, aunque sí por un producto de mejor calidad. En Estados Unidos sucede algo similar, aunque en este territorio la expansión china no ha sido tan acusada dadas las restricciones que presentan a ciertos productos de procedencia oriental. 

China, por su parte, ha admitido que su industria automovilística está “descontrolada”, pues está creciendo de una forma casi diaria de manera desenfrenada, lo que estaría abrumando al mercado global con vehículos eléctricos con los que el resto no puede competir por precios. Por ello, el Gobierno chino ha afirmado en un comunicado reciente publicado por The Financial Times que “frenará” parte de esta expansión como respuesta a las “críticas sobre políticas industriales y comerciales injustas”.

BYD
En China existen actualmente casi 100 marcas automovilísticas con mecánicas principalmente eléctricas.

China y su mercado automovilístico “descontrolado”

En el mencionado informe se asegura que el Gobierno de Beijing controlará más exhaustivamente “la construcción ciega” de nuevos proyectos de vehículos eléctricos, tanto de marcas como de modelos. El Ejecutivo asegura que se hacen demasiados vehículos, lo que implica “algunos comportamientos de competencia desordenada”. 

También puntualizan en el informe que Xin Guobin, viceministro de Industria y Tecnología de la Información, ha asegurado que “la industria de vehículos eléctricos de China es una verdadera potencia y uno de los puntos económicos brillantes del país. Ha sido objeto de un duro escrutinio por parte de Europa en particular, debido a las políticas de subsidios que ponen a la industria europea en una desventaja competitiva”. 

La Unión Europea abrió el pasado mes de septiembre una investigación sobre competencia desleal entre la industria europea y la china, ya que la oriental podría estar recibiendo importantes fondos del Gobierno estatal, para exportar productos hacia el Viejo Continente a un precio muy inferior a la media. Parte de culpa de esto también lo tiene su propia mano de obra, que es significativamente barata con respecto a la europea. Todo ello está desembocando en que la propia China tema que se esté instaurando una industria automovilística mucho mayor de los niveles necesarios para la demanda interna

BYD Factory
BYD ya ha dicho que su planta europea estará asentada en Hungría.

El pasado año 2023, China superó a Japón como el mayor exportador de vehículos del mundo. Esto está determinando que los coches eléctricos fabricados en China se están convirtiendo en un gran negocio fuera de su país natal. Como cabeza de lista, BYD es la compañía que más vehículos de este tipo ha conseguido matricular, ya que su cifra se sitúa en 1,6 millones o 3 millones si se suman los híbridos enchufables.

No obstante, en China existen a día de hoy alrededor de 95 marcas de vehículos  que ofrecen más de 300 modelos eléctricos, según apuntan desde Counterpoint Research. Controlar este enorme mercado puede ser relativamente complicado, así como insustancial cuando el Grupo Geely y BYD dominan casi la totalidad del mismo y sus exportaciones. Esto dejará de ser viable en el momento en que estos dos gigantes establezcan sus respectivas fábricas en Europa. BYD, de hecho, ya busca establecerse en Hungría.