Hace sólo unas semanas, Porsche dio la sorpresa con la presentación de la nueva generación del Cayenne, en forma de SUV 100% eléctrico. Este no llegó con pocas dudas, especialmente después de no especialmente gran éxito detrás del Macan eléctrico. Sin embargo, en la marca alemana lo tienen claro, pues la tecnología que incorpora el nuevo SUV ‘cero emisiones’ es significativamente mejor que toda la que ofrecía la generación anterior con motor de combustión.
De hecho, el nuevo Porsche Cayenne eléctrico no sólo ha sido diseñado para ser el mejor de su categoría por carretera. El vicepresidente de la gama Cayenne, Michael Schätze, confirmó en una entrevista con el medio Drive, que en rutas off-road, el nuevo modelo es infinitamente mejor que su antecesor de gasolina. Esto lo ha corroborado tras probar en primer persona sus capacidades fuera del asfalto y en el desierto de Oriente Medio.
El responsable del Cayenne no deja duda en su opinión
Concretamente, en su entrevista, Schätze aseguró: “El alto rendimiento del Cayenne eléctrico es magnífico. Su tracción exclusivamente integral facilita enormemente subir una duna en Australia, por ejemplo, y permite ajustar la potencia a la perfección. Es mucho mejor que un motor de combustión”.
Recordemos que el nuevo Porsche Cayenne eléctrico se cimenta sobre dos pilares mecánicos fundamentales. El más ‘accesible’, parte desde 105.200 euros y cuenta con 442 CV y 835 Nm de par máximo. El más capaz, el Cayenne Turbo, alcanza los 857 CV y los 1.500 Nm de par máximo, aunque su precio parte desde 165.500 euros.
“Para clientes con requisitos específicos, en cuanto a ángulos de ataque y salida, así como robustez, está disponible con un paquete todoterreno. Su sección delantera, con geometría modificada, facilita el manejo en pistas difíciles, especialmente en subidas y bajadas pronunciadas y terrenos difíciles.”, aseguró el directivo.
Gracias al mencionado paquete todoterreno, el Cayenne eléctrico cuenta con una capacidad de remolque de hasta 3,5 toneladas. No obstante, su mayor peso recalca directamente en una pérdida en la autonomía eléctrica, siendo de 642 km la mejor homologación del SUV con este particular paquete de mejoras.
Una de sus grandes virtudes para ser uno de los grandes vehículos todoterreno es que su peso, pese a ser elevado, es muy parejo al de alternativas de combustión. Concretamente, este se sitúa en torno a las 2,6 toneladas, muy cercano a lo homologado por un Toyota Land Cruiser con motor de combustión. De hecho, para Schätze, el Cayenne eléctrico se siente realmente ligero gracias a un sistema de control de tracción realmente importante.
“La batería es muy ligera. Está ubicada debajo del centro de gravedad del vehículo. El peso de la batería contribuye al buen rendimiento y la maniobrabilidad del coche. Tenemos neumáticos y ejes nuevos, así como el sistema Active Ride. El coche se siente más ligero que el modelo con motor de combustión”, concluyó el responsable de Porsche.