Aunque ya es el mayor vendedor de coches eléctricos en Europa, Volkswagen ha dado un paso estratégico clave en su guerra por recuperar cuota de mercado en China. La marca alemana planea licenciar la solución de conducción autónoma de XPeng para integrarla en sus coches eléctricos destinados al mercado chino a partir de 2026. Así lo adelantan fuentes chinas en una exclusiva que podría redefinir el panorama de la conducción automatizada en el gigante asiático. Desde 2023 y tras el pago de 700 millones de euros, XPeng es uno de los más firmes aliados de Volkswagen en China.
La estrategia “In China, for China” y el desafío de VW
La propuesta de Volkswagen forma parte de su estrategia “en China, para China”, en la que busca adaptar sus modelos eléctricos a las necesidades locales, recortar costes y acelerar su capacidad competitiva frente a las marcas locales, que dominan tanto en volumen como en innovación de software.

Hasta ahora, Volkswagen había apostado por su propia arquitectura eléctrica/electrónica (E/E) específica para China -la Arquitectura Eléctrica China (CEA)- desarrollada en colaboración con XPeng y su división de software Cariad China. Con ese sistema, pretende reducir hasta un 40 % los costes frente a su plataforma modular europea MEB.
Pero incluso con la plataforma CEA, el gran reto ha sido implementar capacidades de conducción automatizada robustas, cada vez más populares en China. Al licenciar la solución de XPeng, Volkswagen opta por una vía más eficiente: aprovechar un sistema ya maduro y adaptado al mercado chino, en lugar de desarrollarlo desde cero.
¿Qué implica el uso de la tecnología de conducción autónoma de XPeng?
La clave está en que Volkswagen no pretende comprar o fusionarse con XPeng: la idea es licenciar su sistema autónomo, integrando esa tecnología en los modelos eléctricos de Volkswagen para China. De esa forma, se reducirán significativamente los tiempos de desarrollo y validación, al igual que los riesgos. Esta decisión permite a los alemanes cubrir sus necesidades de software autónomo sin depender exclusivamente de su propia ingeniería, que ha experimentado reestructuraciones importantes en los últimos años.
Para XPeng, esto representa una validación técnica frente a otros fabricantes y le ofrece ingresos por licencias, reforzando su posición como proveedor de software automotriz y no solo como fabricante de coches. Es posible, aunque bastante improbable que Volkswagen use este acuerdo en Europa.

Impacto en la competencia y en el mercado chino de coches eléctricos
La decisión de Volkswagen es un reconocimiento explícito del liderazgo que han alcanzado las compañías chinas en software para automoción y conducción autónoma. En un sector cada vez más dominado por la combinación de hardware y software, los alemanes recurren a alianzas estratégicas para no quedarse rezagados. En Estados Unidos han firmado un acuerdo muy similar con Rivian. La compañía de RJ Scaringe será clave en el desarrollo de los nuevos coches eléctricos que la marca germana planea vender tanto en Norteamérica como en Europa.