Durante estos días, hasta el próximo día 12 de noviembre, se está celebrando la 26ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, también conocida como COP26. En la cumbre se están discutiendo, entre otras cosas, los objetivos en cuanto a reducción de emisiones de carbono para los próximos años, pero no todas las partes implicadas en esa amplia actividad (la de contaminar) parecen estar de acuerdo.
Son muchas las ciudades y autoridades públicas que ya han hecho propuestas formales para reducir las emisiones contaminantes en los núcleos urbanos en los próximos años, si bien las medidas suelen ir enfocadas al transporte por carretera y no tanto contra otras actividades. En este sentido, los fabricantes de coches -y el sector del automóvil en general- son una parte importante de la película, sin embargo no todos parecen estar de acuerdo en los mismos términos.
Próximamente se anunciarán los compromisos alcanzados en materia de reducción de emisiones para coches nuevos de cara al año 2040, pero el acuerdo no cuenta con el apoyo de algunos de los mayores fabricantes del mundo. Según informa Financial Times, el compromiso que se anunciará en las próximas horas abarca una cuarta parte de los coches del mundo y está respaldado por fabricantes como Daimler, Ford, General Motors y BYD, además de por gobiernos como el de Canadá y Chile.
Sin embargo, Toyota, Volkswagen, la alianza Renault-Nissan e Hyundai-Kia no han apoyado dicho acuerdo. Los cuatro fabricantes (o grupos de fabricantes) mencionados son actualmente cuatro de los cinco mayores fabricantes de automóviles del mundo por volumen de ventas anuales. El acuerdo en cuestión compromete a los firmantes a poner fin a la venta de coches nuevos que generen emisiones en "los principales mercados" para el año 2035, y a nivel mundial para 2040.
El presidente de Daimler, Ola Kallenius, dijo que el acuerdo «demuestra que hay una mentalidad subyacente de que hay que hacer algo y se puede hacer». Kallenius declaró que la ausencia de firmantes importantes como BMW y el Gobierno alemán no restaba impacto al acuerdo. En declaraciones al Financial Times, el máximo responsable de Daimler aseguró que «cada empresa tiene que tomar su propia decisión, pero todos los colegas que conozco están avanzando a un ritmo muy rápido», añadiendo que «hay muy pocos países que pongan tanto dinero, recursos o capacidad intelectual en la transformación como la industria automovilística alemana». Recordemos que Mercedes-Benz ya se había comprometido a vender solamente coches eléctricos en los mercados «donde sea factible» a partir de 2030.
El acuerdo ha contado con un apoyo parcial. China y Estados Unidos, los dos mayores mercados automovilísticos del mundo, no han firmado. Tampoco Alemania. No obstante, algunos estados como California, Nueva York y Washington sí han respaldado el acuerdo, además de ciudades como Dallas, Charleston, Atlanta, Seattle (Estados Unidos), São Paulo (Brasil) y Buenos Aires (Argentina). También lo ha respaldado LeasePlan, la mayor empresa de alquiler de coches del mundo, y Uber, que se ha comprometido a que toda su flota sea de cero emisiones para 2030.
En otro acuerdo distinto relativo al transporte pesado y de mercancías, los fabricantes de camiones presentes en la COP26, como Scania, y operadores logísticos como DHL, se han comprometido a que todos los camiones nuevos tengan emisiones cero a partir de 2040. Este acuerdo ha sido apoyado por Reino Unido, Chile, Turquía o Nueva Zelanda, pero de nuevo volvió a carecer del apoyo del gobierno estadounidense.
