Fiel a su legado como fabricante de vehículos todoterreno, Santana Motors regresa con fuerza. La histórica firma jienense, que marcó una época con modelos míticos como el Santana 2500 o los Aníbal del Ejército español, presenta ahora una nueva generación con el espíritu aventurero que caracterizo a la marca.
Su nuevo modelo es el Santana 400, una pick-up que estará a la venta con una versión híbrida enchufable (PHEV), capaz de recorrer hasta 120 kilómetros en modo completamente eléctrico y más de 1.000 kilómetros de autonomía total combinada, según la marca.

Mide 5.494 milímetros de largo y tiene 429 CV
Los buenos datos que ha publicado Santana no se quedan ahí, ya que su sistema de propulsión combina un motor de combustión de 1.5 litros con un propulsor eléctrico de alto rendimiento, para alcanzar los 429 CV de potencia conjunta y 800 Nm de par máximo. Su batería es de 32 kWh, pero todavía no se han detallado cifras concretas de autonomía, potencias de recarga ni tiempos para cargar la batería.
Mide 5.494 milímetros de largo, 1.960 milímetros de ancho y 1.950 milímetros de alto. El interior cuenta con una pantalla táctil central de 14,6 pulgadas, cuadro digital configurable y 28 sistemas de asistencia a la conducción (ADAS). Entre ellos destaca la visión panorámica de 540 grados, que permite visualizar incluso el terreno bajo el vehículo, un recurso especialmente útil en maniobras de precisión o conducción off-road extrema. “Todo ello se combina con materiales resistentes y un diseño ergonómico que prioriza el confort y la durabilidad”, asegura Santana en un comunicado.
Ambos modelos se han desarrollado con el objetivo de dominar cualquier superficie, y sus cifras lo confirman: altura libre al suelo de 240 milímetros, ángulo de ataque de 31 grados, salida de 26 grados, rampa de 39,5 grados y capacidad de vadeo de 800 milímetros, situándolos entre los vehículos más capaces de su categoría. La caja trasera, que mide 1.520 milímetros de largo 1.600 de ancho y 550 de alto, ofrece más de 1.100 litros de volumen útil, soporta cargas superiores a 800 kilogramos y permite remolcar hasta 3.200 kilogramos.
La fiabilidad ha sido otro de los pilares en el desarrollo de esta nueva generación, según Santana. El fabricante asegura haber sometido a ambos vehículos a más de dos millones de kilómetros de pruebas en condiciones extremas de calor, frío y humedad, un programa de validación comparable al de los fabricantes globales más exigentes. El objetivo es garantizar la resistencia, durabilidad y espíritu de servicio que siempre definieron a la marca española.

El nuevo Santana 400 PHEV se producirá íntegramente en la Santana Factory de Linares (Jaén), cuyas instalaciones están siendo modernizadas para recuperar la plena capacidad industrial. Este paso supone un impulso significativo para el tejido económico de la comarca y una segunda vida para un centro que fue emblema de la automoción andaluza durante décadas. Paralelamente, la compañía trabaja en el desarrollo de una red comercial sólida tanto en España como en mercados internacionales estratégicos.
Actualmente, Santana Motors ya ha alcanzado acuerdos con más de 30 concesionarios en España, Italia, Portugal, Andorra y Gibraltar, un primer paso hacia su expansión global. La marca presentará próximamente las especificaciones completas, niveles de acabado y precio del modelo.
