El CEO de CUPRA, Markus Haupt, sueña con el fin inminente del arancel “injusto” al Tavascan producido en China, y tiene el apoyo de España

Markus Haupt, CEO de SEAT y CUPRA, cree que Bruselas logrará acabar con los aranceles para el Grupo Volkswagen en menos de 2 meses.

markus haupt ceo cupra seat fin aranceles tavascan pronto 1
Haupt tiene el apoyo de la Generalitat de Cataluña y cree que la Comisión Europea acabará ayudando al Grupo Volkswagen.
15/12/2025 13:00
Actualizado a 15/12/2025 13:00

El CUPRA Tavascan se ha convertido en uno de los principales puntos de fricción entre la política comercial europea y la estrategia industrial del Grupo Volkswagen. Desde octubre de 2024, el SUV eléctrico fabricado en China soporta un arancel adicional del 20,7%, que se suma al 10% ya existente para las importaciones de vehículos, elevando el sobrecoste total hasta el 30,7%.

Durante la inauguración de la nueva planta de ensamblaje de baterías de SEAT y CUPRA en Martorell (Barcelona), el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, calificó este gravamen de “injusto” y reclamó abiertamente a la Comisión Europea que lo retire. A su juicio, el arancel castiga una inversión estratégica realizada con una “voluntad constructiva” y va en contra del objetivo de reforzar la industria europea del vehículo eléctrico. 

Confianza en un desenlace cercano

markus haupt ceo cupra seat fin aranceles tavascan pronto 2
Hay confianza plena en Bruselas.

En la misma línea se expresó el CEO de SEAT y CUPRA, Markus Haupt, quien aseguró que las conversaciones con Bruselas “van en la dirección correcta” y confió en que la eliminación de los aranceles pueda materializarse en un plazo de uno a dos meses. El directivo subrayó que el Tavascan es un modelo clave para la marca y reconoció que, en su situación actual, es “deficitario” para la compañía.

Haupt explicó que SEAT decidió no trasladar el impacto de los aranceles al precio final para el cliente, una decisión que ha presionado los márgenes del grupo. De hecho, SEAT y CUPRA cerraron los tres primeros trimestres del año con un beneficio operativo de apenas 16 millones de euros, un 96% menos que en el ejercicio anterior, en parte por el efecto de estos gravámenes.

Electrificación y autonomía europea

Más allá del caso concreto del CUPRA Tavascan, Illa aprovechó el acto para reclamar una mayor autonomía industrial europea en un contexto geopolítico incierto. Defendió que proyectos como la electrificación de SEAT y CUPRA refuerzan el liderazgo industrial de Cataluña y encajan con los objetivos del Plan de Impulso al Vehículo Eléctrico 2025-2030, que prevé impulsar 180.000 matriculaciones de vehículos electrificados y desplegar 9.000 nuevos puntos de recarga públicos.

markus haupt ceo cupra seat fin aranceles tavascan pronto
CUPRA podría así aspirar a un mayor margen de beneficio.

Desde el Gobierno central, el ministro de Industria, Jordi Hereu, vinculó la nueva planta de baterías con la necesidad de “democratizar” la movilidad eléctrica, comparando el papel que tuvo el SEAT 600 en el pasado con el que aspira a desempeñar el futuro CUPRA Raval, primer eléctrico urbano del grupo que se fabricará en Martorell y llegará al mercado en 2026.

Preparados para 2035, pero con flexibilidad

En este contexto, Haupt reiteró que SEAT y CUPRA están preparadas para un escenario sin motores de combustión en 2035, en línea con los objetivos europeos, aunque reclamó flexibilidad regulatoria y estabilidad para que la transición sea viable. Por su parte, el CEO de Volkswagen, Thomas Schäfer, insistió en que la electrificación solo avanzará si se dan las condiciones adecuadas para el consumidor, especialmente en precios e infraestructuras de recarga.

A la espera de la decisión final de Bruselas, que podría acabar fijando un precio mínimo alternativo a los aranceles para todos los coches eléctricos fabricados en China, el CUPRA Tavascan se ha convertido en un símbolo de los retos que afronta la industria europea del automóvil en plena transición eléctrica, atrapada entre la protección comercial, la competitividad global y la necesidad de mantener inversiones y empleo en el continente.