Mercedes opta por incorporar un 'trampantojo' para que los leales a AMG se sumen a la electrificación

Los deportivos de AMG también tendrán que ser eléctricos en un futuro y para fomentar sus ventas los alemanes plantean recursos técnicos que aumenten las sensaciones al volante.

El AMG GT XX es el futuro de división deportiva de la marca alemana.
El AMG GT XX es el futuro de división deportiva de la marca alemana.
03/07/2025 06:00
Actualizado a 03/07/2025 06:00

Las marcas parecen estar desesperadas con tal de ampliar la venta de coches eléctricos. Está claro que más pronto que tarde el coche eléctrico se convertirá en la realidad de todos los conductores en Europa y en el mundo, pero se necesita tiempo. El cambio es muy radical y hay sectores que no parecen nada interesados en dar el cambio. Para ellos se buscan fórmulas alternativas como la que ahora se plantea en Alemania. Mercedes ha decidido optar por una especie de ‘trampantojo’ técnico para hacer que sus seguidores más fieles se sumen al carro del coche eléctrico. ¿La idea? Optar por los cambios de marcha simulados.

Conducir un deportivo de Mercedes firmado por AMG exige cierto compromiso con la pasión, con la velocidad y con las sensaciones. Hay varios factores que aportan ese toque único de la combustión, desde el sonido del motor y del escape hasta el empuje generado por la caja de cambios. La compra de un AMG no es una compra lógica, sino pasional y como buena compra emocional se debe recompensar a un cliente que, por norma general, abona una factura con muchos ceros. No se puede decir que Mercedes haya tenido mucho éxito con los pasos hasta ahora dados en senda eléctrica de la división deportiva.

Mercedes AMG GT XX Motor
Los motores de flujo axial del AMG GT XX son revolucionarios.

Mercedes quiere ofrecer ‘algo más’ en sus eléctricos de AMG

El ejemplo más claro es el del AMG C63. La berlina de alto rendimiento ofrece casi 700 caballos de potencia (680 CV) extraídos de un sistema PHEV. ¿Cuál es el problema? El motor de cuatro cilindros que sirve como propulsor principal. Los clientes, a esos a los que se les pide más de 150.000 euros por el coche, no están dispuestos a abonar esa cantidad por un motor tan pequeño. Da igual la tecnología o la velocidad que el coche pueda alcanzar. Hoy por hoy, la realidad es que el coche eléctrico no interesa a quien más dinero tiene. Puede que opten por coches eléctricos comunes para su día a día, pero a la hora de sumar las siglas AMG en la fórmula buscan la tradición.

Mercedes y el resto de marcas tienen un problema en este aspecto porque al igual que el resto de la flota, los deportivos tendrán que adaptarse a la normativa eléctrica. Ya somos testigos de lanzamientos importantes como el Maserati GranTurismo Folgore o el inminente Ferrari eléctrico. La semana pasada Mercedes presentó en sociedad un prototipo que adelanta las líneas de ese primer AMG eléctrico. Bautizado como AMG GT XX,  nadie podrá negar que resulta espectacular en su forma y en su rendimiento. Tres motores de flujo axial generan más de 1.300 caballos de potencia a la que alcanzan una velocidad punta de 360 km/h.

Motor Eléctrico Mercedes
Cada vez son más las marcas que introducen una caja de cambios en sus coches eléctricos.

Si bien las cifras animan a pensar que todo el mundo puede estar deseando comprarlo, la verdad es que los alemanes necesitan ofrecer algo más. Markus Schäfer, jefe técnico de Mercedes ha reconocido a Autocar que la marca podría llegar a usar soluciones como el cambio de marchas simulado o la vibración simulada de un motor V8. Trampantojos al fin y al cabo que intentan engañar al conductor y hacerle pensar que está en un coche mucho más tradicional. El uso de caja de cambios en coches eléctricos no es nada nuevo, Porsche lleva años usándola en el Taycan, aunque ha rechazado simular las transiciones. Mercedes ha hecho lo mismo con su nuevo CLA eléctrico. Dos marchas, una para velocidades bajas y medias y otra para altas velocidades.