Philipp Offergeld, ecologista alemán, no lo duda: “La movilidad eléctrica es más práctica y económica que los coches de gasolina”

Según un estudio, los coches eléctricos resultan cada vez más atractivos para los consumidores por muchos frentes, especialmente el económico. También son cada vez más rentables para las marcas.

Philipp Offergeld afirma que tener un coche eléctrico ya es algo asumible para la mayoría.
Philipp Offergeld afirma que tener un coche eléctrico ya es algo asumible para la mayoría.
16/12/2025 07:00
Actualizado a 16/12/2025 07:00

Lejos quedan esos días en los que los coches eléctricos eran simplemente para unos pocos. Las muy limitadas cifras de autonomía, los altos precios de compra o la escasa infraestructura de carga, todo ello ya ha quedado atrás y actualmente comprar un vehículo ‘cero emisiones’ puede resultar más que rentable para buena parte de los clientes potenciales. Así lo ha corroborado el nuevo informe publicado por el Consejo Internacional para el Transporte Limpio (ICCT) titulado “Electromovilidad y Participación Social”.

El director de proyectos de protección climática de la Fundación Mercator, Philipp Offergeld, apunta lo siguiente: “La electromovilidad ya no es un tema de nicho; se está volviendo más práctica y económica para el uso cotidiano que operar vehículos con motor de combustión. Sin embargo, los hogares con bajos ingresos aún dudan en cambiar”. Por ello, el responsable aboga por incentivar su uso y compra a través de medidas políticas específicas.

renault 5
El Renault 5 entra dentro de los cánones de un vehículo eléctrico 'accesible'.

Los coches eléctricos son cada vez más baratos y prácticos

Para el ecologista, son muchos los puntos que hacen falta como método de incentivación a su compra. Entre otras cosas, Offergeld apuesta por una formación más clara y realista que llegue a todo el mundo. También espera que el ejecutivo alemán y europeo se enfoque en dotar de más ayudas económicas a la compra, pero también en apoyar a la industria de la infraestructura de recarga.

Según el mencionado estudio, los coches eléctricos cuentan a día de hoy con importantes ventajas en cuanto al consumo energético. De hecho, aseguran que, en el cómputo mensual o anual, es significativamente más asequible pagar la recarga de un coche eléctrico que hacerlo en un vehículo de combustión. Como referencia, indican que con un kilometraje anual de unos 45.000 kilómetros, el propietario de un ‘cero emisiones’ puede llegar a ahorrar más de 2.000 euros al año.

Este ahorro viene inequívocamente de parte de una recarga ejercida en el propio garaje personal. Sin embargo, los ahorros también pueden venir de parte de quienes emplean únicamente los puntos públicos, aunque en menor medida. “Por lo tanto, la transparencia y la fijación de precios justos son cruciales para que más personas puedan beneficiarse de forma fiable de las ventajas de coste de los vehículos eléctricos”, afirman.

leapmotor b10
El Leapmotor B10 es un SUV eléctrico, práctico y de precio atractivo.

El mencionado estudio termina hablando sobre el precio cada vez más atractivo de los coches eléctricos. Hasta hace sólo unos años, apostar por este tipo de mecánicas estaba reservado en mayor medida a gente de alto poder adquisitivo. A día de hoy, existen numerosas ofertas en el mercado con vehículos de precio accesible para la mayoría.

Bien es cierto que los coches eléctricos siguen siendo más caros frente a unos modelos de gasolina equiparables. Sin embargo, la diferencia de coste de compra se ve equilibrada con el paso del tiempo y ahorro en el precio del desplazamiento o de su uso cotidiano. “Los coches eléctricos más grandes y caros siguen dominando las matriculaciones, pero los pequeños también están ganando importancia”, apuntan.

Recordemos que actualmente existen alternativas ‘asequibles’, como el Renault 5 E-Tech, el Hyundai Inster o el BYD Dolphin Surf, entre otros muchos. Si se busca algo más de espacio interior, vehículos como el Leapmotor B10 o el Renault 4 E-Tech, entre otros, parten por un precio de menos de 30.000 euros, sin contar ayudas o descuentos.