Hace apenas unas semanas Subaru sorprendió presentando dos prototipos deportivos que continuaban su saga STI de manera simultánea. Los Performance-B y Performance-E, dos enfoques diferentes de afrontar la llegada de un nuevo o nuevos modelos de alto rendimiento con un alma diferente: el primero con motor de combustión y el segundo de cero emisiones. Ahora, se han dejado ver en vivo por primera vez en el Tokyo Motor Show 2025
Masaaki Kobayashi, gerente general de productos de Subaru Corporation, habló con Drive en el evento, delante de la dupla de modelos, confirmando que el hecho de presentar prototipos deportivos de dos naturalezas diferentes no es algo al azar: “Queremos ofrecer la opción de elegir, esa es la razón por la que mostramos [dos conceptos], uno como ICE [motor de combustión interna] y otro como BEV [vehículo eléctrico de batería]”.
Que sea el cliente el que elija
“Por supuesto, estamos desarrollando vehículos eléctricos de batería para lograr la neutralidad de carbono, pero, por otro lado, [está] el cliente que elige este automóvil [Performance-B], por lo que queremos que la opción [disponible] para el cliente, por eso hicimos un automóvil ICE con un motor [también]”, comenta Kobayashi.
La marca ha anunciado recientemente el Trailseeker, un cruce entre SUV y ranchera, y el Uncharted, que junto al Solterra conforman su trío de modelos eléctricos. Es consciente de la importancia de la movilidad eléctrica y de que esta tecnología también se puede aplicar a los deportivos, pero también sabe que en este campo los aficionados son menos transigentes. Esto, sumado al hecho de que suelen ser modelos con unos números de producción más limitada, haría que fuera factible tener en su gama un STI de combustión pura que no afecte de manera muy negativa a las emisiones medias de la marca.
Desde Subaru saben, también, que plantear la opción de un STI eléctrico es algo peliagudo, así que están atentos a la respuesta del público: “Esta es la primera vez que lo mostramos al público, así que tal vez queramos saber qué piensan los clientes, tal vez obtengamos sus comentarios y luego pensaremos [en versiones de producción]”, dijo Kobayashi. De hacerlo realidad, sería la primera marca que ofrezca un mismo modelo de alto rendimiento a la vez con mecánica de gasolina y de cero emisiones.
Diseños muy diferentes
Cuando se mostraron, quedó claro que el Performance-B era una opción de corte mucho más realista, tanto que, a pesar de ser un prototipo, podría pasar por un coche de producción sin recibir ningún cambio. Con el Performance-E la marca ha ido más lejos, con un estilo más futurista y agresivo. A pesar de ello, todas las decisiones de diseño que se han tomado con el eléctrico son funcionales.
“Como pueden ver, el capó es muy bajo, especialmente en la parte delantera. Es muy bajo, lo cual favorece la aerodinámica, lo que favorece la autonomía y la carga aerodinámica. Intentamos encontrar el mejor equilibrio entre autonomía y conducción deportiva [en el diseño exterior del Performance-E]. Simplemente intentamos encontrar la mejor proporción para la aerodinámica y el espacio interior, y descubrimos que este es el más capaz y el más eficiente en términos de formas y funciones en general”, explica Kobayashi.