Tesla añade una función muy invernal que los usuarios llevaban esperando desde hace años

El frío es el enemigo más peligroso al que se tienen que enfrentar los conductores de un coche eléctrico, y no lo decimos sólo por la pérdida de autonomía. Tesla pone ahora remedio.

El puerto de carga de Tesla es automático. Está perfectamente integrado, pero tiene fallos.
El puerto de carga de Tesla es automático. Está perfectamente integrado, pero tiene fallos.
01/12/2024 09:30
Actualizado a 01/12/2024 09:30

Llega el frío y con él la delicada e inoportuna situación de las carreteras. Lluvia, viento e incluso nieve. La baja de las temperaturas pone en jaque la movilidad de todos, pero especialmente la de los usuarios de un coche eléctrico. En invierno el consumo aumenta y la autonomía cae. Sin embargo, aunque es un problema bastante gordo, no es el único que surge cuando el termómetro empieza a caer. Ahora, tras años viendo el inconveniente, lanza ahora una actualización que será de gran ayuda a sus usuarios, principalmente a aquellos que viven en zonas donde hace mucho, pero mucho frío.

Cuando llega esta temporada de bajas temperaturas y el coche duerme en la calle no es nada raro levantarse por la mañana y ver que el coche está cubierto por una fina capa de hielo. La humedad del aire se congela por todo el coche al bajar los termómetros de los 0 grados. En España este no es un problema general, aunque sí hay zonas donde se da habitualmente en la temporada invernal. Sin embargo, sí es una situación corriente para aquellos que vivan en regiones de frío extremo, como el norte de Europa donde en invierno apenas alcanzan los 0 grados centígrados durante varios meses.

Supercharger Tesla
Tesla trabaja para mejorar el uso de sus vehículos y estaciones de carga con la llegada del frío invernal.

Nueva función incorporada, aunque sólo para unos pocos coches

Ya en el primer invierno del Tesla Model 3, allá por el año 2018, algunos usuarios de zonas remotas reportaron problemas para recargar sus coches eléctricos. El problema es que la congelación impide abrir el puerto de carga automático. El sistema reconoce que hay un impedimento y no abre. Hacerlo a mano puede suponer romper los soportes o el motor instalado. Es el mismo problema que surge con las manillas de las puertas. Tesla enrasa los tiradores a la carrocería para reducir la aerodinámica, pero cuando surge el frío y la congelación es muy difícil abrir el coche. El cristal de la puerta tampoco baja esos milímetros necesarios a la hora de abrir.

Es decir, son varios los problemas que surgieron a raíz del primer invierno del Model 3. Sin embargo, Tesla supo reaccionar a tiempo y corrigió muchos de ellos gracias a una de sus famosas actualizaciones de software. Más tarde lanzaron una práctica solución que millones de usuarios utilizan a diario en invierno, la de precalentar el habitáculo y descongelar el puerto de carga y los cristales. El problema es que ambas funciones van asociadas. Se puede quitar la escarcha del puerto y de los cristales, pero no de forma independiente. Ahora, gracias a una actualización sí se puede. 

A finales de 2020 Tesla empezó a instalar un calentador dedicado al puerto de carga, pero insistimos que esta función estaba interconectada a la de los cristales. Hoy ya no gracias a la actualización 2024.44.3.1. Los usuarios podrán seleccionar de forma concreta la descongelación del puerto de carga. Tan sólo tendrán que seguir los siguientes pasos: Controles > Servicio > Calentador del puerto de carga. La mala noticia es que por el momento no está disponible en todos los vehículos. Las notas indican que por el momento está limitada a un segmento muy pequeño de vehículos. Tesla no ha especificado cuándo lo hará extensible a toda la gama.

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