Hay dos tipos de encuestas entre los clientes de automóviles que suelen captar la atención cuando se publican anualmente: las de fiabilidad y las de lealtad o fidelidad a una marca, que podría entenderse como de satisfacción. Y este año, la corona de la lealtad automovilística ha cambiado de manos, pasando de un histórico gigante de Detroit a una de las marcas de moda.
Tesla le ha robado el cetro a Ford en los premios de Lealtad Automovilística de S&P Global Mobility, celebrados el pasado lunes, un título que Ford llevaba consiguiendo durante nueve años consecutivos.
En total, Tesla se ha alzado con la máxima distinción en cinco categorías diferentes: Mayor Lealtad General a una Marca, Mejora más notable en Lealtad a una Marca, Porcentaje de Conquista más Alto, Mayor Lealtad a una Marca de Propulsión Alternativa y Mayor Lealtad del Mercado de Minorías Étnicas. Esta última categoría mide la diversidad de clientes de una empresa/marca. Tesla ganó este premio, porque el 52% de su clientela leal pertenece a grupos sociales considerados minorías étnicas.
La tasa de lealtad a la marca Tesla fue del 67,2%. Esto quiere decir que más de dos terceras partes de los clientes de Tesla repiten con la marca a la hora de comprarse un nuevo coche, ya sea como reemplazo del que ya tienen o como adición a este. Por su parte, General Motors se alzó con el Premio de Mayor Lealtad a un Grupo Fabricante, con un 65,4%, según Detroit Free Press. Subaru ganó en la categoría de Mayor Lealtad a la Red de Concesionarios.
La marca que dirige Elon Musk, que mañana mismo presentará su próximo Plan Maestro, también cosechó varios premios individuales para dos de sus modelos. El Tesla Model 3 y el Tesla Model Y obtuvieron un galardón cada uno en las categorías Luxury Small Car (Coche Pequeño de Lujo) y Luxury Small Utility (SUV Pequeño de Lujo). La segmentación de estas categorías puede sonar extraña para los clientes europeos, pero en Estados Unidos, donde los coches son generalmente mucho más grandes, los Model 3 y Model Y son vehículos relativamente pequeños.
Hace sólo unos días conocíamos un análisis de Bloomberg que ponía de manifiesto que el Tesla Model 3 básico cuesta, en Estados Unidos, 4.930 dólares menos que el vehículo nuevo medio que se vende hoy en día en el país norteamericano (sin tener en cuenta las ayudas federales de 7.500 dólares para la compra de vehículos eléctricos). Según datos de Kelley Blue Book, el coste medio de un coche nuevo en Estados Unidos alcanzóen enero los 49.388 dólares, lo que supone un aumento del 6% respecto al año anterior.
