El MySE18.X-20MW es un aerogenerador marino de 20 MW fabricado por Mingyang Smart Energy. Es considerado el aerogenerador de mayor capacidad individual del mundo. Desde hace un año, este aerogenerador marino se encuentra ubicado en la provincia de Hainan, China. Destaca por su diseño modular y ligero, con una potencia flexible de hasta 20 MW y un diámetro de rotor de 260-292 metros.
Entre sus características principales destaca el diámetro de su rotor, de 260-292 metros y su potencia instalada, 20 MW. Es capaz de generar más de 80 GWh con los que se calcula que abastece de electricidad a aproximadamente 96.000 personas anualmente y evita la emisión a la atmósfera de 66.000 toneladas de CO₂ cada año.

El susto del mayor aerogenerador del mundo
Ha sido diseñado para operar en regiones con vientos fuertes. Resiste tifones con velocidades de vientos de 80 m/s. El diseño incluye unas colosales palas de hasta casi 300 metros de diámetro por lo que su instalación representa un hito en la industria eólica marina.
Durante la fase de pruebas, sometido a condiciones excepcionales de viento, el prototipo sufrió un fallo grave: varias palas se fracturaron y se desprendieron al comenzar a girar, aunque sin causar daños al personal ni al sistema base Imágenes circuladas en redes sociales mostraban fragmentos de estas aspas gigantes cayendo mientras la turbina seguía funcionando.

La compañía Mingyang se defendió argumentando que este proceso forma parte esencial de la certificación de fiabilidad y que el modelo aún no está en fase de comercialización o producción en serie. Las causas exactas de la fractura no han sido reveladas, aunque el diseño estaba pensado para soportar tifones de gran intensidad, como el súper tifón Yagi, al que de hecho resistió.
El MySE18.X‑20 MW representaba un hito en la capacidad generadora, desplazando a modelos anteriores. Sin embargo, la propia Mingyang ya había anunciado otra versión aún más ambiciosa: el MySE‑22 MW, con rotor de más de 310 metros y palas de fibra de carbono, apuntando a una producción estimada de 80 GWh anuales con menor número de unidades.
Este suceso pone en evidencia que ya no se trata solo de incrementar potencia o tamaño, sino de garantizar la fiabilidad estructural frente a retos climáticos cada vez más extremos. El sector debe abordar estas complejidades: nuevas dimensiones implican materiales más resistentes, diseños más sofisticados y protocolos de prueba más estrictos.
Europa tampoco se queda atrás; por ejemplo, Dinamarca desarrolla turbinas offshore de 21 MW y 300 metros de altura con Siemens Gamesa, como parte del proyecto HIPPOW, apoyado por el Fondo de Innovación europeo En paralelo, la turbina flotante Qihang, de la estatal china CRRC, rompió récords: 151 m de torre y rotor de 206 m con 20 MW y genera unos 62 GWh anuales.