Si Vespa fue la referencia de la posguerra italiana, Lambretta siempre fue la alternativa y rival: líneas angulosas, alma mecánica y una identidad forjada en acero. Décadas después, esa esencia regresa reinventada con la Lambretta Elettra S, el modelo con el que la legendaria firma entra de lleno en la era eléctrica intentando no renunciar a su ADN.
Presentada en el EICMA de Milán 2025, la Elettra S de Lambretta demuestra que la movilidad eléctrica también puede tener estilo y personalidad. Su nombre recuerda inevitablemente a la Vespa Elettrica, pero Lambretta lo deja claro desde el primer vistazo: esto no es un simple scooter futurista, sino una reinterpretación moderna (y de producción) de sus clásicos de los años 60'.
Diseño con la popular alma retro

El encanto de la Lambretta Elettra S reside en su carrocería metálica tradicional, un elemento casi extinto en los scooters modernos. Lambretta mantiene el chasis de acero, símbolo de robustez y equilibrio, logrando una presencia sólida y una sensación de conducción auténtica.
Su estética combina lo mejor del pasado y el presente: el frontal es afilado y contemporáneo, mientras que la zaga redondeada evoca los modelos históricos de la marca. Completa el conjunto un sistema de iluminación LED, una pantalla TFT digital, y sutiles detalles cromados que rinden homenaje al diseño italiano más puro.
Con 132 kilos de peso, la Lambretta Elettra S transmite estabilidad sin perder agilidad en el entorno urbano. Monta una horquilla delantera tipo tie-rod y un amortiguador trasero, una configuración pensada para absorber las irregularidades del asfalto con elegancia.
Ahora con un motor silencioso

Bajo su piel clásica se esconde un motor síncrono de imanes permanentes con una potencia nominal de 4 kW y picos de 6 kW (equivalente a unos 8 CV). Puede alcanzar los 90 kilómetros/hora y acelerar de 0 a 40 kilómetros/hora en unos 10 segundos, cifras más que suficientes para moverse en el tráfico urbano. Es decir, que requiere del carné de moto A1 o de un permiso de coche (B) con un mínimo de tres años de vigencia.
Su batería de 4,5 kWh de tipo NMC ofrece una autonomía de hasta 120 kilómetros, recargándose completamente en seis horas en un enchufe doméstico, o del 20 al 80% en poco más de tres horas con carga rápida. Sus tres modos de conducción (Eco, Ride y Sport) permiten ajustar el carácter del scooter según el estilo del día.
Pero más allá de los números, lo que distingue a la Lambretta Elettra S es su filosofía: recuperar la emoción de conducir un scooter que no solo transporta, sino que transmite algo. Un vehículo que respeta su legado mientras se adapta a un futuro libre de emisiones.
El regreso de un icono enfocado a los nuevos tiempos
Prevista para su lanzamiento en Europa a finales de 2026, con un precio estimado de 6.500 euros, la Lambretta Elettra S se sitúa entre los scooters eléctricos urbanos y los modelos prémium de estilo retro.
No busca liderar una revolución tecnológica, sino demostrar que la movilidad eléctrica también puede tener alma. Y en un mundo dominado por la eficiencia, Lambretta apuesta por lo que siempre la hizo especial: carácter, diseño y autenticidad.