Silence instala el primer intercambiador de baterías para motos eléctricas de España

El armario cargador de baterías se encuentra en la primera Flagship Store que la marca ha inaugurado en la esquina Diagonal-Muntaner de Barcelona.

 Silence es el único fabricante a nivel nacional, y el segundo europeo, que fabrica sus propias baterías.
Silence es el único fabricante a nivel nacional, y el segundo europeo, que fabrica sus propias baterías.
12/06/2019 17:56
Actualizado a 25/06/2019 14:41

Silence, el fabricante de motos y baterías eléctricas con sede en Barcelona, inaugura su primera Flagship Store oficial de marca en la ciudad que le vio nacer. Se trata de un espacio dedicado a su nuevo modelo S01, el primero que la compañía diseña exclusivamente para particulares y con el que espera alcanzar las 7.000 motocicletas producidas y los 30 millones de facturación a finales de 2019.

Uno de los objetivos de Silence es, según Carlos Sotelo, CEO y fundador, "terminar con las barreras de los puntos de carga". Por este motivo desde I+D se ha diseñado un armario intercambiador de baterías cuyo objetivo es ofrecer al usuario una batería cargada cuando la necesite. Una tecnología que es posible gracias a la conectividad que silence integra en todas sus motos. Cualquier vehículo que sale de la planta de producción que Silence tiene en Molins de Rei está conectado a través de una App. Esto permite al usuario no depender de la llave para arrancarlo, saber la ubicación de su moto en cualquier momento, el estado de la batería, la cantidad de CO2 que ha ahorrado gracias a conducir un vehículo eléctrico y también en qué punto de la ciudad se encuentra la batería cargada más cercana.

Y es que más allá de este primer armario intercambiador de baterías, Silence tiene como objetivo –junto a su socio Repsol– instalar otros en algunas gasolineras de la ciudad. Un servicio que podrán utilizar tanto las motos de flotas (B2B) como algunos particulares de Barcelona. Y es que la compañía arrancará en la ciudad un proyecto piloto en el cual el cliente comprará la moto y hará un renting de la batería. Esto permite al usuario rebajar el coste inicial del vehículo y, por otro lado, contar siempre con una batería cargada y en óptimas condiciones, localizable a través de la App.

Esta nueva fórmula de adquisición llega cuando la compañía está a punto de alcanzar las 500 pre-reservas. Son las primeras unidades del modelo S01 que los clientes han podido adquirir vía online y que cuentan con la grabación del número de serie así como unas condiciones de mantenimiento y garantía especiales.

La S01

Después de alcanzar a nivel nacional el 60% de la cuota de mercado en el segmento B2B con más de 2.000 motocicletas en 2018 que posicionaron la marca como el vehículo eléctrico –de cualquier categoría- más matriculado, ahora Silence da el salto al B2C.

Carlos Sotelo, CEO y fundador de Silence asegura que "se trata de un salto natural. Nuestro producto ya se ha afianzado a nivel flotas y ahora nos tocaba revolucionar la movilidad eléctrica con una moto que fuera más allá de las dos ruedas".

Se trata de un vehículo de prestaciones equivalentes a una 125cc, 100% conectado e inteligente.  A diferencia de otros vehículos eléctricos, la S01 cuenta con una batería extraíble de 6kwH que más allá de autonomía y potencia, permite al usuario transportarla y cargarla de forma muy sencilla en cualquier enchufe y saltarse, así, las barreras del punto de carga.

Carlos Sotelo  asegura que con este vehículo "no hemos pretendido fabricar una moto sino una forma de vida". Y es que la S01 es un vehículo sostenible a nivel 360º.

La batería

Silence es el único fabricante a nivel nacional, y el segundo europeo, que fabrica sus propias baterías. "Esto nos distingue de la competencia. El corazón del vehículo eléctrico es su batería. Tener el desarrollo in-house nos da mucho margen de maniobra", confirma Sotelo.

Además de alimentar la motocicleta, la llamada "be" va acompañada de dos elementos. Por un lado un árbol solar –que puede instalarse en cualquier balcón o jardín- para cargar la batería de forma totalmente sostenible y gratuita y, por otro lado, el llamado 'inverter' de desarrollo propio. Se trata de un adaptador que, conectado a la batería, permite transformar la energía acumulada y aplicarla para otros fines. Desde conectar cualquier dispositivo, hasta salir de fin de semana en caravana sin consumir otra energía que la de la batería.

Temas