Una bicicleta eléctrica, en especial de montaña, lleva a día de hoy un desarrollo a sus espaldas espectacular. Lejos quedó aquello de montar un motor a una bicicleta pulmonar y a rodar.
Cualquier marca que se precie a día de hoy tiene un departamento tan desarrollado (o más) que cualquier otro para diseñar y evolucionar una bicicleta eléctrica. Pero es que a ello hay que sumar lo que un fabricante de motores hace con cada unidad: en definitiva, a veces nos quejamos de los precios que alcanzan las bicicletas pero, en estructuras tan pequeñas (no hablamos de grandes marcas de, por ejemplo, coches) tantas horas empleadas para dar a luz una bicicleta han de tener, de una forma u otra, reflejo en los precios.
"Después de muchas pruebas, llegamos a un punto que genera gran confianza a nuestros corredores". (Dave Ziegman, probador de Yeti Cycles).
La competición: laboratorio de pruebas
El australiano Jared Graves es un laureado corredor de mountain bike: en su haber, campeonatos mundiales en 4X y Enduro, medalla de bronce de Descenso en los Campeonatos del Mundo, ha representado a Australia en la modalidad de BMX en los Juegos Olímpicos de 2008 y ha ganado un total de 10 títulos nacionales de categoría Élite en nada menos que 5 disciplinas distintas. Casi nada.
Y, desde que en 2005 recaló en la marca norteamericana Yeti, ha estado involucrado en el desarrollo de diferentes bicicletas: la 303 DH, la 4X de doble suspensión, la DJ, la Special Projects BMX, la SB66, la SB6 o la SB150. Una de las últimas ha sido la bicicleta eléctrica de montaña de Yeti: la espectacular 160E.
"Cada vez que encuentro el límite de la 160E, sigo encontrando el mío". (Jared Graves).
Esta Yeti 160E se ha desarrollado, evidentemente, en la más alta competición: el pasado 2024 se proclamó, a manos de Ryan Gilchrist, campeona del mundo de las E-EDR (competición de Enduro para bicicletas eléctricas que, desgraciadamente, no se va a celebrar en este 2025).
Jared Graves, como decíamos, participó en el desarrollo de la 160E, impregnando de su conocimiento y, sobre todo, de un lado humano hasta ahora poco habitual a la bicicleta. Graves es conocido por sus logros ciclistas pero también por haber sido capaz de superar un cáncer. No debería ser relevante (ciclísticamente hablando) pero los propios responsables de Yeti remarcan que "es una gran persona y estamos orgullosos de tenerlo en nuestro programa. Jared es un crack en casi todas las disciplinas que intenta y podría ser uno de los mejores pilotos de la historia".
"La mentoría de Jared a lo largo de los años ha tenido un impacto invaluable en mi carrera, en mi pilotaje y en mi persona". (Richie Rude, Campeón del Mundo de Enduro).
"La ética de trabajo y el impulso competitivo de Jared son legendarios, y estamos emocionados de que continúe siendo mentor de nuestros jóvenes corredores y trabaje con nuestro equipo de desarrollo de productos. Ha sido mentor de algunos de los mejores en el deporte: Richie Rude, Sam Willoughby, Kasper Woolley e incluso un joven Jack Moir, que corrió para Yeti en 2013, se benefició de su sabiduría", dice Chris Conroy, CEO de Yeti.
Si un profesional compite con una eBike de serie, ¡eso es que es excepcional!
Tengamos presente lo dicho en este apartado: si corredores de la talla de Jared Graves o Ryan Gilchrist compiten (¡y ganan!) con una bicicleta casi de serie (los componentes son iguales, solamente que el comportamiento se ha personalizado a los gustos de cada corredor), ¿qué podemos hacer los usuarios 'de a pie' con estas monturas?
"El sistema de suspensión Sixfinity de la 160E tiene una capacidad de suspensión infinita, realizado para las demandas de las e-Mtb actuales" (Yeti Cycles).
Será difícil que lleguemos a explorar los límites de estas bicicletas. Donde más horas se invierten es en diseñar un cuadro con una geometría que pueda permitir rodar muy rápido, pero con toda la seguridad del mundo. Se hacen múltiples pruebas, se diseñan (y fabrican) diferentes prototipos con variaciones para llegar a un producto final 'redondo'.
La competición, además de proveer de mucha información en cuanto al diseño y geometría mencionado, pone a prueba la resistencia del propio cuadro y de los componentes. Por ello, no solo las marcas de las bicicletas necesitan tener productos compitiendo si no que también los fabricantes de componentes han de testar sus materiales en competición. Y para ello, las opiniones de los distintos corredores son fundamentales.