China endurece requisitos de exportación de grafito, esencial para baterías eléctricas

China, principal productor y exportador de grafito, ha impuesto restricciones a las exportaciones de este material como contraataque a Estados Unidos.

El grafito es imprescindible para las baterías de los vehículos eléctricos.
El grafito es imprescindible para las baterías de los vehículos eléctricos.
29/10/2023 07:30
Actualizado a 29/10/2023 07:30

La guerra económica entre las dos mayores potencias políticas y económicas del mundo tiene un capítulo nuevo. El Gobierno de China ha anunciado recientemente el endurecimiento de los requisitos para productos derivados del grafito, un material esencial para la fabricación de baterías, entre otras industrias.

A partir del próximo 1 de diciembre, China pedirá una licencia especial para la exportación de tres tipos de grafito "altamente sensibles", según informó la cartera de Comercio y la Administración General de Aduanas a través de un comunicado.

El Ministerio de Comercio del gigante asiático alegó que se trata de un paso "para salvaguardar la seguridad y los intereses nacionales" y que "no está dirigido contra ningún país en concreto", aunque el anuncio llega apenas unos días después de que Estados Unidos impusiera nuevas restricciones a la exportación de microchips a empresas chinas.

Entre los productos restringidos se incluyen tres tipos de grafito de alta pureza, resistencia y densidad (que anteriormente ya estaban controlados temporalmente), seis tipos de grafito natural en escamas y sus derivados. Al mismo tiempo, China ha levantado el control sobre cinco tipos de grafito de baja sensibilidad que había establecido de manera temporal, pero necesarios para las industrias siderúrgica, metalúrgica y química.

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También son clave para la industria del vehículo eléctrico, concretamente para la fabricación de baterías. Este sector, de gran importancia económica y geopolítica y con grandes perspectivas de crecimiento, depende fuertemente de China, que tiene un gran poder sobre la cadena de suministro.

El gigante asiático es el mayor productor mundial de grafito, con cerca del 65% de los suministros de todo el planeta en 2022, según el informe anual del Servicio Geológico de Estados Unidos. Además, refina más del 90% del grafito que se utiliza en los ánodos de las baterías de los vehículos eléctricos y posee prácticamente el 100% de la cuota del mercado en otros productos derivados del grafito utilizados en maquinaria, industria aeroespacial y petroquímica.

¿Qué es el ánodo de una pila y para qué sirve?

El ánodo es el polo negativo de una pila. La función del ánodo en una pila es proporcionar energía, liberando electrones que fluyen a través de un circuito eléctrico hacia el cátodo (polo positivo).

En una batería de iones de litio, el ánodo está hecho de grafito. Este se oxida al entrar en contacto con el electrolito, que es una solución de carbonato de litio, y pierde electrones. Estos electrones fluyen a través del circuito eléctrico, proporcionando energía al dispositivo que se está alimentando.

Actualmente, hay varias empresas que están desarrollando baterías con ánodo de silicio, un material que tiene mayor densidad energética que el grafito. Sin embargo, esta tecnología todavía no se utiliza en baterías de producción en serie, de forma que el grafito sigue siendo el material imprescindible en la fabricación de las baterías.

No es una prohibición

A partir de diciembre, la exportación de los artículos de grafito afectados deberá ser autorizada mediante la expedición de una licencia específica, tras la oportuna revisión por parte del Ministerio de Comercio, mientras que la aduana se encargará de los procedimientos de inspección y liberación basados en la licencia de exportación emitida.

En este sentido, el Gobierno chino advierte de que si un operador exporta sin licencia, más allá del alcance de la licencia o comete otros actos ilegales, el Ministerio de Comercio o Aduanas impondrán sanciones administrativas de conformidad con las leyes y reglamentos pertinentes.

No es una prohibición y, por tanto, no está claro qué consecuencias tendrá esta medida a corto plazo. Podría repercutir en una subida de precios, como ha ocurrido tras las restricciones aplicadas a la exportación de galio y germanio. El pasado mes de agosto, China impuso restricciones a estos dos metales clave para la fabricación de semiconductores y otros componentes para la transición energética. La medida, de carácter temporal, no tuvo repercusiones significativas en ninguna industria, más allá de una subida de precios consecuencia del desequilibrio de oferta y demanda.