El debate sobre la calidad de las baterías de los coches eléctricos vuelve a encenderse, y esta vez con datos contundentes. EV Clinic, un taller especializado en vehículos eléctricos con sedes en Croacia y Berlín, ha publicado un análisis comparativo que apunta a diferencias muy significativas entre los distintos proveedores de celdas utilizados por el fabricante automovilístico en los Tesla Model 3 y Tesla Model Y.
Los resultados son claros: las baterías fabricadas por Panasonic en Estados Unidos muestran una vida útil notablemente superior frente a los packs producidos por LG Energy Solution en China.
Panasonic frente a LG: dos químicas, dos comportamientos

El estudio se centra en dos tipos de batería ampliamente utilizados por Tesla:
- Celdas NCA (níquel-cobalto-aluminio) de Panasonic, ensambladas en EEUU
- Celdas NCM811 (níquel-cobalto-manganeso) de LG Energy Solution, producidas en Nanjing (China).
Aunque ambas tecnologías prometen altas densidades energéticas, el comportamiento real observado en carretera muestra divergencias notables.
Según los datos recopilados por EV Clinic en intervenciones reales a clientes, las baterías Panasonic alcanzan de media unos 400.000 kilómetros, mientras que las de LG se quedan en torno a 250.000 kilómetros, una diferencia cercana al 60%.
Fallos prematuros y degradación acelerada en los módulos de LG

El taller afirma que más del 90% de los casos en los que un Tesla equipado con baterías LG acudió por problemas, la reparación a nivel de celda resultó inviable. La razón: no se trataba solo de un fallo aislado, sino de módulos completos con múltiples celdas degradadas simultáneamente.
EV Clinic describe estos módulos como afectados por una “degradación en cascada”: incluso sustituyendo las celdas defectuosas por unidades recuperadas de características similares, las celdas restantes, ya muy debilitadas, fallaban poco después.
En palabras del taller, las celdas afectadas presentaban resistencias internas extremadamente altas, un indicador claro de envejecimiento acelerado y una señal de que la reparación no resultaría económica.
En Panasonic, los fallos llegan más tarde y suelen ser reparables
El comportamiento de las baterías Panasonic contrasta significativamente. Según EV Clinic, los problemas suelen aparecer a partir de los 250.000 kilómetros, pero generalmente implican una única celda defectuosa, lo que facilita una reparación puntual sin comprometer el resto del pack.
Esta diferencia en el patrón de fallo permite a los talleres prolongar la vida útil del conjunto sin necesidad de sustituir módulos completos, lo que se traduce en menores costes de mantenimiento para los propietarios.
Un toque de atención para el mercado
Aunque el análisis no constituye un estudio científico en sentido estricto, sí aporta evidencia práctica desde un servicio técnico que trata con cientos de vehículos cada año. Los datos vuelven a abrir el debate sobre la fiabilidad de algunas químicas emergentes y el impacto que puede tener la procedencia de las celdas en la durabilidad final del vehículo.
Para Tesla, la comparación añade presión en un momento en el que el fabricante diversifica proveedores para garantizar capacidad productiva global. Para los usuarios, supone una información valiosa a la hora de evaluar el mercado de segunda mano o el coste total de propiedad.