Desde hace años, con cada encuesta, la mayoría de personas asume su negativa a comprar un coche eléctricos en base a una mala experiencia con la recarga de estos vehículos. Buena parte de los entrevistados asume que faltan puntos de carga públicos y que la autonomía de los modelos será escasa. Los puntos sobre el rango ya se está saldando poco a poco, aunque, tal y como han confirmado numerosos directivos, la solución a toda esta disyuntiva pasa, inevitablemente, por tener las estaciones de carga en Europa.
La idea es poder ofrecer vehículos eléctricos más asequibles gracias al uso de baterías más pequeñas. La ‘falta de autonomía’ se compensaría con la mayor existencia de puntos de recarga repartidos por todas las carreteras de la Unión Europea. Por todo ello, queda claro que el servicio de carga podría ser la clave para la expansión de la movilidad eléctrica.
La directora de Fastned sabe cuál es la responsabilidad de su tipo de negocio
Por ello, en una reciente entrevista con el medio Autoflotte, Linda Boll, directora de Fastned Alemania, ha definido claramente el que será el punto clave para la expansión de la electrificación: “Las malas experiencias perjudican a todo el sector de la movilidad eléctrica, incluyéndonos a nosotros”.
La compañía Fastned ofrece en sus instalaciones todo un área de descanso. En ellas se incluye un espacio para comprar comida o bebidas, baños para clientes o, simplemente, zonas de esparcimiento para entretener a los niños. Esta compañía de origen neerlandés está en plena expansión por Europa. En Alemania ya prevé instalar 34 estaciones antes de concluir 2026, mientras que, de forma paralela, irá llegando a otros países de la región.
En españa, concretamente, Fastned cuenta ya con dos estaciones en pleno funcionamiento. Ambas ubicadas en Cataluña. En los próximos meses inaugurarán otras 13 que ya están en desarrollo, las cuales se asentarán en otros muchos puntos de la geografía nacional.
Desde Fastned tienen claro que la facilidad de uso y el buen servicio en sus instalaciones son factores clave para lograr que los clientes vuelvan y tengan una buena percepción de todo lo que significa recargar un vehículo eléctrico. De hecho, Boll señala que en los próximos años no será tan importante la potencia de los cargadores como “la calidad y la capacidad de carga” de los mismos.
También juega un papel fundamental el precio de la recarga, aunque “actualmente la funcionalidad es lo primordial y más importante. Los clientes deben sentirse seguros y cómodos. Tener acceso a baños limpios, café o refrigerios”, aseguró Boll. A esto añadió, hablando del precio del servicio: “Algunas estaciones cobran hasta 20 céntimos o más, a menudo sin que los clientes lo sepan de antemano”.
Aunque muchos den de lado, la recarga eléctrica en zonas urbanas también es importante para Fastned: “Cobrará cada vez mayor importancia en el futuro, por lo que incluso estamos buscando específicamente nuevas ubicaciones en zonas urbanas”. Pero insiste en que lo más importante es dar un servicio sencillo y eficiente: “Quienes cargan sobre la marcha pueden llegar a su destino con fiabilidad”. Después de todo, estos clientes serán los que, con el boca a boca, puedan recomendar el servicio o incluso la compra de un vehículo eléctrico a otros allegados. “Así es como puede crecer la movilidad eléctrica en Europa”, concluyó Boll.